Tren de danas y nevadas tardías primaverales
Un conjunto de borrascas de diferentes orígenes están merodeando por la península Ibérica y se han aislado de la circulación polar trayendo masas de aire de diferentes orígenes. Su interacción puede generar nevadas en la Península, e incluso en Madrid capital
Las borrascas aisladas
Dos borrascas aisladas de la circulación polar o danas, están situándose alrededor de la península.
Una con reflejo marcado en superficie (bfa, baja fría aislada) es de origen atlántico y aporta aire húmedo y subtropical. Se sitúa al oeste peninsular.
La otra dana ha venido desde el centro de Europa y se desplaza en el flanco sureste de una potente dorsal y anticiclón de bloqueo situado en las cercanías de las Islas Británicas. Esta dana aporta el aire frío y seco que se cuela por niveles bajos-medios y es la causante del descenso acusado de temperaturas. Esta dana ya está dejando nevadas en zonas del norte.
El anticiclón poderoso de bloqueo
Este anticiclón, que en superficie ha marcado cerca de 1055 hPa, ha dejado récords de presión en las Islas Británicas para finales del mes de marzo. Esta situado al oeste de Irlanda. El papel de este anticiclón en el tiempo peninsular es doble:
- Inyecta aire muy frío y relativamente seco de componente norte-noreste desde el continente europeo y conduce a un sistema de vaguada –dana muy fría, como se comentó con anterioridad. La dana venida desde Europa aporta las temperaturas muy frías que están ya afectado ya al norte peninsular
- Bloquea el paso de borrascas atlánticas del oeste por sus pasos tradicionales y por un ramal del sur obliga a dichas borrascas a pasar por la parte meridional peninsular. Una de estas borrascas ya está entrando por el suroeste peninsular, o al menos sus sistemas frontales. Mañana 31 de marzo la borrasca entrará y barrera el sur y suertes peninsular. A su paso interaccionará con la otra dana europea.
En estas condiciones se esperan un descenso acusado de temperaturas por el norte y centro peninsular, nevadas generalizadas en el norte, Pirineos y ambas mesetas a cotas bajas, especialmente para el 31 de marzo. La sensación térmica fría será acusada en muchos puntos peninsulares.
Las nevadas del 30-31 podrían afectar a zonas del centro peninsular, incluyendo Madrid capital ya que la cota de nieve se sitúa en algunos lugares entre los 300-600 m.
La situación tendería a mejorar para inicios de abril en cuanto a las nevadas pero la danza e interacción entra ambas borrascas dejará tiempo primaveral con chubascos intensos en el levante español, especialmente en el noreste y Baleares.