Tendencias del tiempo para los días Noche Buena y Navidad de 2020

Con la presencia de la pandemia de la COVID-19, las restricciones de movilidad en muchas zonas de España, las limitaciones en las reuniones familiares y los toques de quedas en las diferentes de regiones españolas, la importancia de la predicción del tiempo en los días 24 y 25 de diciembre han decaído algo, pero aún así la predicción interesa a muchos, aún en estas condiciones.

Las predicciones para esta fechas, y en estos momentos, hay que hacerlas como tendencias a menos de una semana vista ya que la atmósfera esta en constante cambios con baja predictibilidad. Mientras que en otros años la situación estaba dominada por una anticiclón estable, estos días las predicciones muestran constates cambios con pasos de borrascas, frentes, entradas de dorsales atlánticas, etc. Y parece que estas tendencias de cambios se mantendrán.

Un chorro intenso de norte y ondulante para 24-25 de diciembre de 2020

Las potentes borrascas generadas en el Atlántico Occidental y el poderoso anticiclón frío y estático sobre Rusia van a condicionar la estructura del chorro, las borrascas y anticiclones el lado oriental del Atlántico y, por tanto, en regiones España.

21-23 de diciembre

La primera parte de la semana estará, posiblemente, conformada por el paso de frentes por el noroeste peninsular y la entrada de una dorsal anticiclónica en gran parte de la Península y Baleares donde predominarán las nubes bajas y nieblas, con tiempo “estable”. Un frente podría entrar el miércoles 23 por el noroeste y penetrar a zonas de más al interior a la vez que se debilita. En Canarias predominarán los vientos del este.

Mientras, una dorsal anticiclónica se reforzará en el Atlántico Norte y central con un ramal orientado de norte a sur orientado hacia la Península. Esta entrada de norte con aire frío y relativamente húmedo va a condicionar el tiempo en gran parte de España en los próximos días.

24-25 de diciembre: entrada fría de norte con incertidumbre en intensidad

Los modelos apuntan a un cambio de tiempo con un chorro polar ondulado y un ramal norte-sur penetrando por el norte peninsular acompañado con aire frío y cargado con humedad por su recorrido marítimo. La clave para estos días es la intensidad y orientación del grado de penetración y de la evolución de la vaguada profunda asociada a este chorro, que podría aislar una dana al oeste de la o esta vaguada podría pasar por el norte peninsular hacia el Mediterráneo. Un seno de bajas presiones se podría formar sobre el sureste peninsular y condicionar el tiempo en el levante.

El tiempo invernal será más intenso en el norte y menos a medida que nos desplacemos hacia el sur. Esta entrada de aire frío con descensos de temperatura podría generar nevadas en zonas altas del norte y Pirineos. El frío se desplazaría posteriormente hacia el Mediterráneo Occidental y para el 25 de diciembre la nubosidad y las precipitaciones podrían aparecer en las zonas del levante peninsular por le generación de una baja en el sureste.

En Canarias, los vientos de componente este podrían generar una subida de temperaturas con una entrada de polvo sahariano y calima en los días 24 y 25.

Se muestran los mapas medios y desviaciones estándar del geopotencial en 500 y presión en superficie para el 24 de diciembre a las 12 UTC para el modelo probabilístico ENS-ECMWF.

En resumen, la primera parte de la semana del 21 al 23 de diciembre el tiempo estará condicionado por el paso de frentes por el noroeste con tiempo anticiclónico en el resto de España con nieblas y nubes bajas en el el interior peninsular. Para el 24-25 de diciembre se espera una entrada de norte con aire frío y relativamente húmedo venido de latitudes más altas. El “mal” tiempo, con frío y bajadas de temperaturas asociadas se graduará de norte a sur peninsular. La incertidumbre para estos días es alta pues dependerá del grado de pulsación del viento de norte y su posterior aislamiento en altura o no. El Mediterráneo occidental podría también verse afectado por tiempo revuelto para el 25 de diciembre por la presencia de una baja secundaria en el sureste. Canarias podría verse afectada por vientos de componente este con calima y polvo en suspensión.

Afinar más en estos momentos con tanta variabilidad e incertidumbre no es una tarea fácil, pero el marco general y sinóptico podría ser éste según las predicciones probabilísticas.