La sequía extrema sin precedentes en el Cuerno de África continuará en 2023
Las consecuencias catastróficas de la sequía de varios años continuarán en 2023 en el Cuerno de África, dejando a las comunidades con una necesidad urgente de asistencia
Los pronósticos estacionales sugieren una posibilidad razonable de que las próximas lluvias de marzo a mayo vuelvan a tener un rendimiento inferior. Si esto sucediera, sería una sexta mala temporada sin precedentes, según una nueva declaración conjunta de las agencias meteorológicas y los socios humanitarios.
La OMM es uno de los 15 signatarios de la declaración conjunta, que dice que las comunidades necesitarán años para recuperarse de esta sequía históricamente severa. Hace un llamamiento a los esfuerzos humanitarios sostenidos "sin remordimientos".
El Cuerno de África se enfrenta a una sequía de tres años sin precedentes, con impactos humanitarios catastróficos. La ocurrencia de otra mala temporada de lluvias entre marzo y mayo de 2023, según lo pronosticado por algunas agencias meteorológicas, tendría consecuencias devastadoras para las comunidades.
El 22 de febrero, el Foro de Perspectivas Climáticas del Gran Cuerno de África proporcionará un pronóstico estacional más detallado para la temporada de lluvias de marzo a mayo. Esto es organizado por el Centro de Predicción y Aplicaciones Climáticas (ICPAC) de la IGAD, que es un centro climático regional de la OMM. El foro reúne a científicos del clima, investigadores, usuarios de sectores socioeconómicos clave, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, socios para el desarrollo, tomadores de decisiones, medios de comunicación y partes interesadas de la sociedad civil.
La OMM publicará su actualización periódica sobre El Niño/La Niña y el clima estacional mundial a finales de este mes.
Independientemente del desempeño estacional, las necesidades humanitarias seguirán siendo altas en 2023, y la asistencia multisectorial debe ampliarse para salvar vidas. La sequía actual comenzó con el bajo rendimiento de las lluvias de octubre a diciembre de 2020 y desde entonces se ha profundizado con las cuatro temporadas posteriores también funcionando mal.
La gran escala, gravedad y magnitud del sufrimiento ya observado significa que la región tardará muchos años en recuperarse por completo, dice la declaración conjunta.
Para las familias que han perdido todo su ganado, la reconstrucción de los rebaños será un proceso lento, si es que es posible. Cuando comenzó la sequía actual en 2020, por ejemplo, muchas áreas de pastoreo aún no habían recuperado el tamaño de sus rebaños a los niveles de referencia después de la sequía de 2016/17 y posteriormente perdieron aún más animales. La recuperación en las zonas de cultivo también será un desafío, ya que a los hogares les quedan pocos o ningún recurso para invertir en la siembra y requerirán apoyo para los medios de subsistencia para reiniciar las actividades cuando finalmente lleguen las lluvias favorables.
Los gobiernos, las agencias humanitarias y los donantes deben asumir que las necesidades multisectoriales altas persistirán, y posiblemente incluso aumentarán en 2023. Por lo tanto, es imperativo tomar una respuesta "sin remordimientos" y actuar ahora para mitigar la profundización de la crisis.
Lee el comunicado completo aquí
17 febrero 2023
OMM