Revista Meteoros: ya está disponible el nuevo número

En el nuevo número de la revista Meteoros el SMN de Argentina invita a conocer la historia del pronóstico del tiempo, cuáles fueron las primeras ideas de aquellos que alguna vez soñaron con predecir el comportamiento de la atmósfera, los caminos que llevaron a resolver los grandes desafíos y los avances científicos y tecnológicos que construyeron la meteorología moderna.

En su Editorial se dice:

Este número de Meteoros busca, además, acompañar a quienes lean sus artículos a descubrir la diversidad de pronósticos que hoy se encuentran en internet, redes sociales y medios de comunicación. Como siempre, el acento está puesto en los productos que genera el Servicio Meteorológico Nacional, para que nuestros lectores puedan hacer un mejor uso de esta información. Sabemos que tenemos una enorme responsabilidad como voz oficial para la provisión de pronósticos y alertas en todo el país. Y es importante que, a la hora de utilizar información, la sociedad pueda elegir la fuente, valorar la rigurosidad y comprender las limitaciones de las distintas técnicas. No existen los pronósticos perfectos. Tampoco existen los datos perfectos.

La ciencia es muy clara a la hora de describir a los procesos que ocurren en la atmósfera como algo intrínsecamente caótico e impredecible. Consecuentemente, sólo podemos intentar acercarnos lo más posible a determinar cuál será el estado futuro de la atmósfera en una localidad o a caracterizar un estado presente. Acercarnos lo más posible indica que habrá un error. Y tan importante como la predicción de ese estado futuro, es la predicción del error con que podemos describirlo. Parece un juego de palabras, pero no lo es. Hay estados de la atmósfera más predictibles que otros. Por lo tanto, aunque sea incómodo, es mejor saber que tenemos un 40 a 70 % de probabilidad de que llueva en Catamarca dentro de 4 días en lugar de que nos digan “va a llover en Catamarca dentro de 4 días”. ¿Por qué? Porque debemos asumir que ningún sistema de pronóstico, ni el mejor del mundo, tiene un 100 % de certeza respecto de la ocurrencia de ese fenómeno. Si tal aseveración es manifestada por cualquier proveedor de pronósticos, entonces debemos dudar del profesionalismo de ese proveedor.

Por lo que describí, nosotros, desde el Servicio Meteorológico Nacional, decidimos dedicar este número de Meteoros al pronóstico, a los distintos tipos de pronósticos que se emplean en escalas de tiempo más cortas (diarias) o más largas (semanales, mensuales, estacionales), a los sistemas de alerta temprana, a la comunicación. Porque entendemos que hay mucha información disponible pero sabemos que no toda es igualmente confiable. Y también contamos con que nuestros lectores y lectoras gusten de fomentar el pensamiento crítico y el debate abierto respecto de lo que no podemos describir ni pronosticar con certeza. Eso define el estado del arte de la ciencia y es el límite que tenemos que poner en común. Pero, volviendo al inicio de este editorial, deseo transmitir un mensaje que seguramente develarán al recorrer esta revista.

Podemos aspirar a tener pronósticos “casi” perfectos, datos “casi” perfectos enmarcados en el avance continuo científico y tecnológico. Pero si esta información no llega a la sociedad y a su vez esa sociedad no la utiliza para tomar mejores decisiones, entonces todo el esfuerzo de generar mejores pronósticos e información, queda casi sin efecto, pierde valor. Por eso, los invitamos a que nos ayuden a concretar nuestra visión que es la de trabajar para lograr: “Una sociedad bien informada sobre el tiempo y el clima que pueda tomar decisiones basadas en el conocimiento de los riesgos y del cambio climático, contribuyendo al desarrollo sostenible”. ¡Gracias por acompañarnos!

Además, cuenta lo que siempre quisiste saber sobre los diferentes tipos de pronósticos, a corto y largo plazo, y sobre el nuevo Sistema de Alerta Temprana.

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SMN de Argentina