Los investigadores podrían predecir los raros eventos bioluminiscentes de los "mares lechosos"

Durante generaciones, navegantes de todo el mundo han reportado un fenómeno misterioso: vastas áreas del océano brillan constantemente por la noche, a veces durante meses: es la bioluminiscencia.

Durante siglos, los marineros han contado historias de mares lechosos: enormes franjas de océano que brillan en las noches oscuras, vistas en azul en esta imagen satelital en falso color. Crédito: Steven D. Miller. Universidad Estatal de Colorado/NOAA

La bioluminiscencia es una luz tan brillante que en ocasiones permite leer y guarda una extraña similitud con el aura verde y blanca que proyectan las estrellas fluorescentes que han decorado las habitaciones de los niños. Extendiéndose sobre un espacio oceánico de hasta 100.000 kilómetros cuadrados, la luz, a veces, incluso puede verse desde el espacio.

La bioluminiscencia: un fenómeno antiguo conocido

Este inusual espectáculo bioluminiscente fue denominado por los marineros como "mares lechosos". A pesar de haber sido observado durante siglos, los científicos aún saben muy poco sobre la causa de este efecto brillante, ya que son bastante raros: suelen ocurrir en las regiones remotas del océano Índico, lejos del ojo humano. Una teoría probable es que el brillo proviene de la actividad de una bacteria microscópica luminosa llamada Vibrio harveyi.

Para predecir mejor cuándo se formarán mares lechosos, investigadores de la Universidad Estatal de Colorado han compilado una base de datos de avistamientos de los últimos 400 años.

Descrito en la revista Earth and Space Science, el archivo incluye informes de testigos oculares de marineros, relatos individuales enviados al Marine Observer Journal durante un período de 80 años y datos satelitales contemporáneos.

Avistamientos modernos y base de datos

Esta es la primera recopilación de datos de este tipo sobre mares lechosos en 30 años. En conjunto, muestra que los avistamientos suelen ocurrir alrededor del Mar Arábigo y las aguas del Sudeste Asiático, y que están estadísticamente relacionados con el Dipolo del Océano Índico y la Oscilación del Sur de El Niño.

Se sabe que ambos fenómenos climáticos inciden en los patrones climáticos globales, lo que lleva a los investigadores a preguntarse cómo el deslumbrante fenómeno puede estar conectado con esos procesos.

Justin Hudson, estudiante de doctorado y primer autor del artículo, afirmó que la base de datos ayudará a los investigadores a anticipar mejor cuándo y dónde se formará un mar lechoso. El objetivo, explicó, es enviar un buque de investigación al lugar a tiempo para recopilar información sobre la biología y la química de un mar lechoso. La información sobre estas variables podría ser útil para vincular el evento con la actividad más amplia del sistema terrestre.

Hudson agregó que las regiones donde hay mares lechosos presentan una gran diversidad biológica y son importantes económicamente para las operaciones pesqueras.

"Es realmente difícil estudiar algo si no se tienen datos al respecto", dijo Hudson. "Hasta el momento, solo se conoce una fotografía a nivel del mar, proveniente de un encuentro casual con un yate en 2019. Por lo tanto, aún queda mucho por aprender sobre cómo y por qué sucede esto, y cuáles son los impactos en las zonas afectadas".

La bioluminiscencia en los mares lechosos probablemente se deba a un tipo de bacteria. Crédito: S. Haddock / MBARI

¿Qué son los mares lechosos y cómo se forman?

La bioluminiscencia se presenta en diversas formas en la naturaleza. Uno de los ejemplos más comunes es el parpadeo de la luz trasera de una luciérnaga. Sin embargo, en el caso de los mares lechosos, los investigadores aún intentan comprender qué sucede realmente en la superficie del mar.

Una pista proviene de un buque de investigación que tuvo un encuentro casual con un mar lechoso en 1985 y pudo recolectar una muestra de agua. Los investigadores descubrieron que una cepa específica de bacterias luminosas vivía en la superficie de las algas dentro de una floración, lo que posiblemente causaba un brillo uniforme en todas direcciones.

Sin embargo, este es solo un dato y podría ser engañoso. Para superar la brecha de comprensión, los investigadores han intentado aprovechar la información recopilada mediante imágenes satelitales esporádicas.

Hudson dijo que debido a las regiones más asociadas con el fenómeno, parece probable que la luz se deba a un proceso biológico relacionado con las bacterias.

Las regiones donde esto ocurre con mayor frecuencia son el noroeste del océano Índico, cerca de Somalia y Socotra (Yemen), donde se concentran casi el 60 % de todos los eventos conocidos. Al mismo tiempo, sabemos que las fases del monzón indio impulsan la actividad biológica en la región mediante cambios en los patrones de viento y corrientes, afirmó.

Parece posible que los mares lechosos representen un aspecto poco estudiado del movimiento a gran escala del carbono y los nutrientes a través del sistema terrestre. Esto parece especialmente probable a medida que aprendemos más sobre el papel clave de las bacterias en el ciclo global del carbono, tanto en la tierra como en el océano.

El profesor Steven Miller es el otro autor del artículo y lleva años investigando mares lechosos en la CSU. Ha liderado los esfuerzos para obtener imágenes satelitales del fenómeno y afirmó que la base de datos debería brindar nuevas oportunidades para obtener conocimiento de primera mano.

"Los mares lechosos son expresiones increíbles de nuestra biosfera cuyo significado en la naturaleza aún no hemos determinado completamente", dijo Miller.

Su mera existencia apunta a conexiones inexploradas entre la superficie y el cielo, y entre el papel de las bacterias en el sistema terrestre, desde lo microscópico hasta lo global. Con la ayuda de esta nueva base de datos, forjada desde los barcos del siglo XVII hasta las naves espaciales modernas, comenzamos a tender un puente entre el folclore y la comprensión científica.

"No tenemos idea de qué significan los mares lechosos para los ecosistemas en los que se encuentran. Podrían ser un indicador de un ecosistema saludable o de uno deteriorado; las bacterias que sospechamos que están detrás son una plaga conocida que puede afectar negativamente a peces y crustáceos", dijo.

"Tener estos datos listos nos permite comenzar a responder preguntas sobre los mares lechosos, más allá de esperar y rezar para que un barco se tope con uno accidentalmente".

Referencia

From Sailors to Satellites: A Curated Database of Bioluminescent Milky Seas Spanning 1600-Present, Earth and Space Science (2025). DOI: 10.1029/2024EA004082

Esta entrada se publicó en Noticias en 12 Abr 2025 por Francisco Martín León