Predicción del tiempo: nublado con lluvias dispersas de microplásticos
Los microplásticos multicolores ya se encuentran en casi todos los lugares de la Tierra, desde el hielo cerca del Polo Norte hasta zonas altas del Himalaya pasando por las fosas zonas más profundas de los océanos e, incluso, dentro de muchos organismos
¿Qué son los microplásticos?
Los microplásticos son elementos muy pequeños de plásticos que poseen menos de cinco milímetros de diámetro. Los microplásticos se encuentran desde los Polos hasta las fosas más profundas de la Tierra pasando por las altas montañas. Además, han pasado a la cadena alimenticia de muchas animales, incluido el hombre.
Los microplásticos, y plásticos en general, están en constante aumento en este mundo. De hecho existen "islas oceánicas" a la deriva constituidas por millones de toneladas de plásticos en los océanos.
El Plasticoceno es el nombre que se da actualmente al período terrestre donde la basura plástica aumenta de forma exponencial en casi todo el mundo.
Tratados para reducir la contaminación de plásticos y microplásticos
Políticos y científicos de 175 países se han reunido en París para establecer unos tratados sobre el uso y las limitaciones de los plásticos.
Estas 175 naciones acordaron forjar un tratado legalmente vinculante para frenar la contaminación plástica, con el objetivo de completar las negociaciones para 2024.
No se esperan grandes avances en las conversaciones técnicas, pero las principales políticas debatidas incluirán una prohibición global de artículos de plástico de un solo uso, un esquema de "quien contamina paga" y un impuesto sobre la producción de plástico nuevo o "virgen".
Estas políticas, incluso si se implementan por completo, pueden no ser suficientes para reducir el consumo, según expertos y grupos ecologistas que piden un límite total en la producción de plástico.
Según las tendencias actuales, la producción anual de plásticos a base de combustibles fósiles casi se triplicará para 2060 a 1200 millones de toneladas, mientras que los desechos superarán los mil millones de toneladas, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Precipitación de microplásticos y salud
Mientras esto ocurre, algunos científicos apuntan que millones de partículas microplásticas pueden caer sobre amplias zonas del mundo, según el primer pronóstico meteorológico de contaminación por plásticos.
"Esto hecho debería agudizar el enfoque de los negociadores", dijo Marcus Gover, jefe de investigación de plásticos de la Fundación Minderoo con sede en Perth, Australia.
"Las partículas de plástico se descomponen en el medio ambiente y este cóctel tóxico termina en nuestros cuerpos, donde causa daños inimaginables a nuestra salud".
Se estima que los desechos plásticos matan a más de un millón de aves marinas y 100.000 mamíferos marinos cada año, según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, y las ballenas azules que se alimentan por filtración consumen hasta 10 millones de microplásticos cada día.
En humanos, se han detectado fragmentos microscópicos de plástico en sangre, leche materna y placentas.
Las pruebas con animales han relacionado los productos químicos en los microplásticos con un mayor riesgo de cáncer, problemas reproductivos y mutaciones en el ADN, pero aún faltan datos sobre el impacto en humanos.
"En nuestros cuerpos, los plásticos de los que más debemos preocuparnos son probablemente aquellos entre 10 nanómetros y un micrómetro", dijo el pediatra Christos Symeonides, investigador del Murdoch Children's Research Hospital y la Fundación Minderoo.
Predicción de la "precipitación" de microplásticos
El método desarrollado por los investigadores de la Fundación Minderoo no mide el plástico que cae a través de la atmósfera en tiempo real. Más bien, se basa en una investigación realizada en París a partir de 2015 que recolectó muestras de múltiples lugares durante todo el año y las analizó en el laboratorio.
Este trabajo pionero de científicos franceses descubrió que la mayoría de las partículas de plástico que caían en el área de captación de 2.500 kilómetros cuadrados de París eran nailon y poliéster, probablemente de la ropa.
Otros fragmentos fueron generados por los neumáticos, que los arrojaron especialmente cuando los vehículos frenaban.
La densidad de la "caída de plástico" puede aumentar en un orden de magnitud durante las fuertes lluvias.
Las mediciones realizadas por otros equipos han replicado estos hallazgos en media docena de ciudades de todo el mundo.
Los microplásticos que caen al suelo aún se pueden ingerir o inhalar cuando se agitan, por ejemplo, en un día ventoso.