¿Se podría inyectar polvo de diamante en la atmósfera para ayudar a enfriar el planeta? ¿Cuáles serían sus costes?
Según algunos científicos, la única forma de enfriar el planeta, que se está calentando debido a los efectos de los gases efecto invernadero, es inyectar aerosoles (pequeñas partículas) en la atmósfera para reflejar la luz solar y el calor de vuelta al espacio.
Un equipo multiinstitucional de climatólogos, meteorólogos y científicos de la Tierra ha encontrado evidencia de que arrojar polvo de diamante desde un avión a la atmósfera podría enfriar el planeta. En su estudio publicado en la revista Geophysical Research Letters, el grupo utilizó modelos climáticos en 3D para comparar los aerosoles que podrían usarse para enfriar el planeta.
Enfriando el planeta con polvo de diamante
Investigaciones anteriores han demostrado que la Tierra se encuentra en un punto de inflexión o cerca de él: el calentamiento del planeta ha provocado cambios en los patrones climáticos globales que podrían empeorar a medida que el planeta se calienta. Si esto es cierto, algunos sostienen que la única solución en este momento es encontrar rápidamente una forma de enfriar el planeta. Algunos científicos han propuesto desplegar millones de dispositivos que extraigan carbono del aire, que luego podría ser secuestrado.
El problema es que, si hemos llegado a un punto crítico, eliminar el carbono no servirá de nada: tenemos que encontrar una forma no sólo de reducir el calentamiento, sino de enfriar activamente el planeta. La única forma de hacerlo, según coinciden la mayoría de los expertos en el tema, es inyectar aerosoles en la atmósfera para reflejar la luz solar y el calor de vuelta al espacio.
El principal candidato para este proyecto en este momento es el dióxido de azufre. Como los volcanes lo expulsan de forma natural a la atmósfera, los científicos tienen una idea bastante clara de lo que sucedería si los seres humanos comenzaran a inyectarlo artificialmente. El inconveniente es que podría provocar lluvia ácida en todo el planeta. También podría dañar la capa de ozono y probablemente alteraría los patrones climáticos en la atmósfera inferior.
En este nuevo esfuerzo, los investigadores se preguntaron qué tipo de material serviría mejor como medio de enfriamiento del planeta. Para averiguarlo, construyeron un modelo climático en 3D que mostraba el impacto de la incorporación de aerosoles a la atmósfera. El software también incluía los efectos de los diferentes aerosoles, como la reflexión de la luz y el calor, cómo se depositarían los aerosoles en el suelo y si se aglutinarían en la atmósfera, reteniendo más calor.
El equipo de investigación modeló entonces el impacto en la Tierra de las inyecciones de siete candidatos: calcita, diamante, aluminio, carburo de silicio , anatasa, rutilo y dióxido de azufre.
Los investigadores señalan que, debido a que son químicamente inertes, es poco probable que reaccionen para formar lluvia ácida.
La desventaja, por supuesto, sería el enorme costo: aproximadamente 200 billones de dólares.
Referencia
S. Vattioni et al, Microphysical Interactions Determine the Effectiveness of Solar Radiation Modification via Stratospheric Solid Particle Injection, Geophysical Research Letters (2024). DOI: 10.1029/2024GL110575