El "penacho ibérico" irrumpe en los Juegos Olímpicos de París 2024 con un cambio radical del tiempo

Según las previsiones de los modelos meteorológicos, las temperaturas durante los últimos días de julio serán muy superiores a la media en el sur y, sobre todo, en el oeste de Europa. Las temperaturas más anómalas se esperan en Francia, Benelux y la península ibérica a principios de la próxima semana. Todo ello producido por la llegada del penacho ibérico.

¿Qué es el penacho ibérico?

El “penacho ibérico” es una lengua de aire cálido que se eleva preferentemente desde la meseta de la península ibérica y se desplaza hacia latitudes más altas por delante de una vaguada de niveles altos o por una DANA, que se aproxima por el oeste.

Su nombre en la bibliografía anglosajona es "The Spanish Plume" o el penacho español (o mejor, ibérico), que resulta un tanto engañoso. Estrictamente hablando, debería denominarse el penacho ibérico, ya que su origen hay que encontrarlo en las zonas mesetarias de la península ibérica.

Realmente, el penacho ibérico es una lengua, cinta transportadora, irrupción canalizada, etc., que lleva aire muy cálido hacia latitudes del norte de la península ibérica.

En algunas ocasiones la vaguada de niveles altos va acompañada de un frente frío en superficie. Por lo tanto, la masa de aire potencialmente inestable es advectada a modo de cinta transportadora cálida desde latitudes peninsulares hasta zonas de más alta latitud, entrando en juego flujos de niveles altos y de niveles bajos. Este fenómeno es especialmente sensible y significativo por sus efectos en superficie en los meses cálidos por las tormentas que se forman en algunos países del oeste de Europa continental e Islas Británicas.

En muchas ocasiones va acompañado por polvo en suspensión y calima.

El penacho ibérico irrumpe en los JJOO de 2024 en París: cambio radical del tiempo

Una situación de penacho ibérico se daría la próxima semana en Europa Occidental y generaría un cambio de tiempo en zonas como Portugal, España, Francia, Bélgica, Suiza, etc. La subida notoria de las temperaturas está garantizada con la llegada de polvo y calima en algunas regiones señaladas. Las tormentas fuertes aparecerán con esta situación por el desplazamiento de la DANA al oeste peninsular .

En este caso, la situación del penacho ibérico se generará por la aparición de una "configuración casi en omega", con una DANA sobre la Península, una dorsal potente sobre Francia y una baja y vaguada allá por los Balcanes.

Subida acusada de las temperaturas con entrada de polvo en suspensión y calima

El anticiclón o dorsal de bloqueo se fortalecerá en zonas de Francia, Benelux y Reino Unido. París pasará de un tiempo fresco e inestable con lluvias a una situación de calor seco con calima y algunas tormentas durante la próxima semana.

Con la llegada de la parte delantera del penacho ibérico, amplias zonas de Francia, y en particular París, se verán afectada por temperaturas muy altas. Por ejemplo y en la primera parte de la semana próxima, París tendría máximas de entre 30 y 34 ºC, e incluso se podría llegar a 35 ºC de forma puntual por los efectos de isla de calor generada por la ciudad.

El sur de Francia podría llegar a los 40 ºC. Todo ello aderezado con la irrupción polvo en suspensión y calima.

Las anomalías térmicas diarias más alta se esperan en Francia, zonas de Alemania, el Benelux y el sur del Reino Unido durante los primeros días de la semana venidera con valores de entre 8 y 10°C, o incluso 12 º C, por encima de media de finales de julio.

Se podría hablar de una ola de calor intensa en algunas zonas de Francia y otros puntos de Europa.

Tormentas

La llegada de la DANA o restos de ella a las zonas de Francia podría generar fuertes tormentas acompañadas de barro.

A partir del jueves el calor amainará, aunque las temperaturas seguirán algo por encima de lo normal en la capital francesa. La entrada posterior de vientos del oeste harán que las temperaturas se normalicen e, incluso, serían más baja de lo normal.

Los deportistas lo tendrán duro en algunas pruebas olímpicas al aire libre cuando las temperaturas superen los 30-35 ºC y la sensación térmica sea mayor.