Ola de calor excepcional en Europa y multitud de incendios forestales
Hacia mucho tiempo que no se alcanzaban temperaturas extremas de récords (máximas y mínimas) en varios países de Europa occidental, que, unido a las bajas humedades ambientales, han propiciado la generación de incendios de gran intensidad
Europa occidental se enfrenta a un periodo de ola de calor extrema e incendios de gran magnitud.
Calores históricos y temperaturas extremas
El calor extremo se ha asentado en España y Portugal desde el 10 de julio de 2022. Antes, 9 de julio, Canarias había tenido altas temperaturas lo que obligó a AEMET a emitir avisos rojos por altas temperaturas y aviso especial por ola de calor.
Las temperaturas máximas superaron pertinazmente los 40 ºC en amplias zonas de la Península y los 47 ºC se llegaron a medir en el norte de Portugal. El calor extremo se extendió posteriormente a Francia, Suiza, Bélgica, Irlanda y Reino Unido. Cientos de récords mensuales y absolutos se han batido en dichos países donde los avisos rojos por altas temperaturas aparecieron durante estos días de julio en dichos países.
El calor llevó a la Met Office, la Oficina nacional de Meteorológica del Reino Unido, a emitir su primer aviso rojo de calor extremo , vigente el lunes y el martes, 18 y 19 de julio, respectivamente, con la posibilidad de que parte del sur de Inglaterra alcanzará los 40 ºC.
La temperatura máxima récord para el Reino Unido es de 38,7 ºC establecida el 25 de julio de 2019 en el Jardín Botánico de Cambridge, a unas decenas de kilómetros al norte de Londres. Según los expertos este récord absoluto podría caer hoy martes 19 de julio.
Consecuencias mortíferas del fuerte calor
Mientras tanto, España y Portugal han reportado al menos 800 muertes relacionadas, directa o indirectamente, con el calor en lo que va de mes, que posiblemente irán a más en fechas venideras. Varias personas han muerto en España directamente por golpes de calor.
Al menos cuatro personas se ahogaron en Reino Unido mientras nadaban en lagos, ríos o embalses para aliviar el calor.
El Reino Unido no está preparado para experimentar temperaturas tan extremas del orden de 35 ºC a 40 ºC y eso se ha dejado sentir, por ejemplo en el transporte.
Los viajeros en trenes han experimentado sobre su carnes los efectos: los railes de vías férreas se han dilatado y se retorcieron por el calor. Muchos viajeros se vieron afectados por los cierres y la reducción de los servicios debido al calor extremo. Las autoridades inglesas aconsejaron a no usar el tren estos días de calor.
El aeropuerto de Luton, cerca de Londres, se vio obligado a cerrar el lunes, 18 de julio, después de que el calor hiciera que una parte de la pista se recalentara y se "doblara".
Más olas de calor
Últimamente las olas de calor van a más en Europa: son más intensas, extensas y duraderas. La peor fue en agosto de 2003 cuando unas 70.000 personas murieron, directa o indirectamente, por el calor extremo en toda Europa.
Los científicos apuntan que el cambio climático está empeorando las olas de calor en su tres facetas.
World Wide Weather Attribution, un panel de investigadores que estudia el papel que juega el cambio climático en los eventos climáticos extremos, concluyó que las temperaturas extremas de 2003, así como las olas de calor europeas analizadas en 2010, 2015, 2017, 2018 y 2019, fueron mucho más altas, más probable y más intensas debido al cambio climático inducido por el hombre.
Numerosos incendios forestales
Los incendios forestales se han disparado, primero en España y Portugal y después por Francia y otros países de Europa. Decenas de miles de personas han tenido que abandonar sus hogares por la cercanía del fuego a sus casas.
Solo en Francia más de 31.000 personas han sido evacuadas durante la última semana debido a los incendios forestales en la región de Gironde, mientras las temperaturas rondaban los 40 ºC y las humedades eran muy bajas.
En España más de 30 incendios forestales están activos, algunos descontrolados.
En España, las condiciones extremas de dos años de sequías, ausencia de precipitaciones, dos olas de calor en junio y julio de 2022 con temperaturas extremas de más de 40 ºC y humedades muy bajas han creado las condiciones meteorológicas ideales para la proliferación de incendios, algunos deliberadamente provocados.
Lo peor es que a las perdidas medioambientales y de propiedades, dos personas que murieron en un incendio forestal fueron encontrados el domingo y el lunes en la provincia noroccidental de Zamora.
Las condiciones meteorológicas no van a mejor en los próximos días contra la lucha de los incendios peninsulares pues se prevé otro periodo de altas temperaturas, al menos, hasta finales de julio.