La “ola de calor” de finales de abril podría continuar en mayo de 2023
Durante esta semana se va a vivir un episodio de calor que va a ser histórico en amplias zonas de España en un entorno de ausencia de precipitaciones, que se podría prolongar a primeros de mayo
El episodio de altas temperaturas, que se va experimentar gran parte de España, va a ser extraordinario con amplias zonas del sur con temperaturas del orden de 35 ºC y picos puntuales del orden de 38-39 ºC en zonas del valle del Guadalquivir, puntos del Guadiana, sureste y Ribera del Ebro. Las temperaturas estarían entre 10 - 12º C por encima de lo normal y, en algunos puntos, llegarían a los 15 ºC por encima de los valores medios.
Oficialmente NO es una ola de calor, pero las altísimas temperaturas bien merecen llevar el entrecomillado hecho de “ola de calor” para la época. De hecho, lo que está ocurriendo en estos últimos años debería replantear la definición oficial de ola de calor en España.
Origen del episodio
AEMET señala en su nota informativa que: "A partir del lunes 24, se va a producir la entrada progresiva de una masa de aire muy cálido y seco, de origen africano, sobre la Península y Baleares. La presencia de esta masa cálida, junto con las condiciones de estabilidad atmosférica y fuerte insolación, provocarán un progresivo y marcado ascenso de las temperaturas, con valores propios de verano y excepcionalmente altos para estas fechas".
Hay otros factores que se pueden sumar a los anteriores efectos generales y sinópticos pueden ser el calentamiento que sufrirá la masa subtropical de aire marítimo y cálida al desplazarse hacia la Península desde el suroeste con subsidencia o descenso vertical, el calor almacenado en los mares circundantes España, especialmente la zona atlántica para esta situación, la sequedad de los terrenos peninsulares que pueden disparar las máximas, y sobre todo, la mayor capacidad de retener calor el aire debido al aumento de gases efecto invernadero en su seno, como marco referente general, que a su vez influyen en los cambios de patrones atmosféricos haciendo que sean más intensos.
Predicciones de esta semana: calor extremo en un ambiente de sequía
Ya se ha comentado que la última semana de abril puede pasar a los libros de historia como un episodio de muy altas temperaturas (aunque quedaría por ver lo que vendrá en los años venideros, que podría dejar pequeña a esta situación).
Es muy probable que el jueves 27 y el viernes 28 se dé la fase culminante de este episodio. El sábado, 29 de abril, aún podrían superarse los 35 ºC en el valle del Guadalquivir, así como los 30 ºC en el resto de la mitad sur y valle del Ebro, para después iniciarse un descenso térmico.
No se prevén lluvias destacables, salvo en zonas de montaña con tormentas secas y precipitaciones esporádicas el tercio norte y noroeste de tipo anecdótico. Los mapas de anomalías de o precipitaciones no se muestran aquí por su poco valor añadido.
Posibilidad de alcanzar los 40 ºC
Los mapas probabilísticos del modelo ENS ECMWF apuntan a muy baja probabilidad de que se alcance este valor en ciertas zonas de la Península. De hecho, las últimas pasadas del modelo han disminuido la probabilidad en extensión y en días en que podrían darse y sólo existe una débil señal como se ve en el mapa siguiente del 28 de abril.
Es muy, muy poco probable de que se iguale los 40 ºC en la Península, pero aún así existe una muy baja probabilidad, como corresponde a una situación muy extrema de alta temperatura para abril.
ACTUALIZADO:
La superación de récords de temperaturas máximas y mínimas está garantizada en este episodio y no solo en 1 o 2 ºC , incluso por más.
Semana de primeros de mayo de 2023: más calor y pocas precipitaciones
Las predicciones semanales del 1 al 7 de mayo apuntan un panorama nada halagüeño: más calor en un ambiente sin precipitaciones, eso sí, el calor podría ser algo menos intenso que el de la semana predecesora de finales de abril.
El mapa de anomalías de precipitaciones no se muestra en este apartado.
Hacia la redefinición de ola de calor
Visto lo visto, sería bueno plantearse, o ir pensando, una redefinición de ola de calor fuera de los meses tradicionalmente veraniegos con criterios y umbrales más adecuados a la realidad en que vivimos, visto lo visto en los últimos 8 años y, especialmente, en 2022 y en este 2023, en particular si estas situaciones afectan a la salud, como así se prevé.
Calor extremo en abril de 2023 y cambio climático
No es posible atribuir, objetiva y directamente, este episodio de calor directamente al cambio climático antropogénico, para ello se debería hacer estudios científicos de atribuciones mediante modernizaciones numéricas. Lo que sí parece claro es que este tipo de episodios (temperaturas altas a inusuales fuera del verano) se alinea con las ideas que apuntan los científicos a que serán más comunes e intensos en un mundo que se calienta por efecto antropogénico.
En resumen calor extremo, anómalo y raro para la época del año, como un verano anticipado en toda regla para finales de abril e inicios de mayo, algo más suave, en un ambiente de sequía, que se agravará por días.