Luces ultravioleta para prevenir la propagación del COVID-19

El Ala 189a de Transporte Aéreo de la Guardia Nacional Aérea de Arkansas planea instalar 50 luces UV Krypton Light Disinfection en toda la Base de la Fuerza Aérea de Little Rock en Arkansas y eventualmente encontrar formas de usar las fuentes de luz dentro de los aviones.

El Pentágono dijo recientemente que otorgó a FAR UV Technologies, una compañía de tecnología de desinfectantes con sede en Missouri, un contrato de $ 1 millón para iniciar el proyecto con el ala, que es la primera unidad del Departamento de Defensa en utilizar el sistema.

El sistema es parte de un conjunto de medidas preventivas que el Departamento de Defensa está probando para prevenir la propagación de COVID-19.

"Esto agregará una capa adicional de protección además de nuestras estrategias actuales de mitigación de riesgos", dijo el teniente coronel (Dr.) de la Fuerza Aérea Thomas DeGraff III en un comunicado.

"Veo esto como un aumento del tiempo de exposición a las interacciones en persona y una disminución de las probabilidades de exposición viral, así como una disminución del riesgo de infección", dijo DeGraff, cirujano de vuelo senior de 189th AW y miembro del grupo Team DUCIMUS Think Tank. "No tenemos los datos médicos revisados por pares para respaldar eso en un 100 por ciento, pero sí sabemos que mata a los patógenos y no causa cáncer o cataratas en humanos".

Según el Dr. David Brenner, un experto en seguridad independiente del Centro Médico de la Universidad de Columbia y subcontratista del proyecto, las luces usan una medida de luz ultravioleta (222 nanómetros) que puede matar una gran cantidad de patógenos de la superficie y del aire, pero que aún es segura para los humanos.

Los sistemas tradicionales de desinfección por rayos UV, como los que utilizan los hospitales para desinfectar el equipo de protección personal, pueden funcionar hasta 254 nanómetros, lo que puede dañar las células sensibles de la piel.