La Niña seguirá unos meses más y se resiste a desaparecer
Sinopsis: Aunque se favorece que La Niña continúe, las probabilidades de La Niña disminuyen tarde en el verano del Hemisferio Norte (52% de probabilidad en julio-septiembre 2022) antes de que aumente levemente en el otoño y temprano en invierno 2022 del Hemisferio Norte (58-59% de probabilidad)
La Niña es un fenómeno climático que forma parte de un ciclo natural-global del clima conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENOS, El Niño-Southern Oscillation, ENSO por su acrónimo en inglés). Este ciclo global tiene dos extremos: una fase cálida conocida como El Niño y una fase fría, precisamente conocida como La Niña. Cuando existe un régimen de vientos alisios fuertes desde el oeste, las temperaturas ecuatoriales disminuyen y comienza la fase fría o La Niña. Cuando la intensidad de los alisios disminuye, las temperaturas superficiales del mar aumentan y comienza la fase cálida, El Niño.
Estatus de La Niña
Durante mayo, las temperaturas de la superficie del mar (SSTs, por sus siglas en inglés) por debajo del promedio persistieron a través de la mayoría del centro y este del Océano Pacifico ecuatorial [Fig. 1].
Sin embargo, las anomalías negativas de SST se debilitaron durante el mes pasado, como se vio reflejado por los valores de los índices del Niño que fluctuaron desde -0.6°C a -0.9°C durante la pasada semana [Fig. 2].
Las anomalías de temperaturas de la subsuperficie (promediadas entre 180°-100°W y 0-300m de profundidad) también se debilitaron con los valores acercándose a cero [Fig. 3].
Las temperaturas bajo el promedio en la sub-superficie persistieron cerca de la superficie hasta por lo menos ~75m de profundidad a través del centro y este del Océano Pacífico, con temperaturas sobre el promedio continuando a una profundidad (~100 m a 200 m) en el oeste y centro del Océano Pacífico [Fig. 4].
Las anomalías en los vientos en los niveles bajos del este prevalecieron en el este-central del Pacífico ecuatorial, mientras que las anomalías en los vientos del oeste en los niveles altos continuaron sobre la mayor parte del Pacífico ecuatorial. La convección estuvo suprimida sobre el oeste y centro del Pacífico y aumentó débilmente sobre partes de Indonesia [Fig. 5]. En general, el sistema acoplado océano-atmósfera reflejó la continuación de La Niña.
Los promedios de pronósticos IRI/CPC más recientes para la región de SST del Niño-3.4 pronostican que La Niña persistirá durante el invierno 2022-23 del Hemisferio Norte [Fig. 6].
Esto actualmente está en gran acuerdo con el consenso del pronóstico este mes, lo que también predice que La Niña continuará hasta el invierno. Sin embargo, está claro que las recientes anomalías observadas atmosféricas y oceánicas se han debilitado y se anticipa que continúe hasta el verano.
La incertidumbre permanece sobre si La Niña pudiera hacer transición a ENSO-neutral durante el verano, con los pronosticadores prediciendo un 52% de probabilidad de La Niña y un 46% de probabilidad de ENSO-neutral durante julio-septiembre 2022. Luego de esta temporada, se pronostica que habrá un enfriamiento, con La Niña favorecida durante el otoño y temprano el invierno. En resumen, aunque se favorece que condiciones de La Niña continúen hasta finales del año, las probabilidades de La Niña disminuyen tarde en el verano del Hemisferio Norte (52% de probabilidad en julio-septiembre 2022) antes de que aumente levemente en el otoño y temprano en invierno 2022 del Hemisferio Norte (58-59% de probabilidad; oprima Consenso del Pronóstico de CPC/IRI para la probabilidad de cada resultado en periodos de 3-meses).
Esta discusión es un esfuerzo consolidado de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), el Servicio Nacional de Meteorología de NOAA y sus instituciones afiliadas.
La Niña y la estación de huracanes en el Atlántico
Según el experto en meteorología tropical, Dr. Philip Klotzbach, la perspectiva más reciente de la NOAA reduce las probabilidades de El Niño y La Niña para el pico de la temporada del Atlántico de huracanes (agosto-octubre) con un aumento en las probabilidades neutrales de ENSO. Probabilidad de caída de El Niño: 4% a 3%, con probabilidad de caída de La Niña: 58% a 54%.
El Niño típicamente reduce los huracanes del Atlántico a través de demasiada cizalladura o cortante del viento. Lo contrario ocurre con La Niña, que los favorece.
9 de junio 2022
Climate Prediction Center NOAA