La calidad de las aguas europeas de baño: España una de las mejores
El Informe anual sobre las aguas de baño publicado recientemente muestra que en 2020 casi el 83 % de las zonas de baño de Europa cumplían el nivel de calidad más exigente de la Unión Europea (calidad «excelente»)
La última evaluación, elaborada por la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA-EEA) en cooperación con la Comisión Europea, se basa en la supervisión de 22 276 zonas de baño en toda Europa en 2020. Las zonas de baño supervisadas a lo largo de todo el 2020 se hallan en los Estados miembros de la UE, Albania y Suiza.
La legislación de la UE no solo ha contribuido a aumentar la calidad general, sino que también ha contribuido a identificar ámbitos en los que es necesaria una actuación específica.
El porcentaje de zonas de baño tanto costeras como interiores con una calidad del agua «excelente» se ha estabilizado en los últimos años en torno al 85 % y en 2020 fue del 82,8 % en toda Europa. El 93 % de los lugares supervisados en 2020 tenían un agua de calidad «suficiente», y en cinco países (Chipre, Austria, Grecia, Malta y Croacia) el 95 % o más de las aguas de baño eran de calidad excelente.
Virginijus Sinkevičius, comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, ha declarado: «La calidad de las aguas de baño de Europa sigue siendo alta, lo que es una buena noticia para los europeos, que se dirigirán a playas y zonas de baño este verano. Esto es el resultado de más de 40 años de existencia de la Directiva sobre las aguas de baño, del intenso trabajo de profesionales especializados y de la cooperación. El Plan de acción "contaminación cero", adoptado en mayo, contribuirá a que las aguas sigan siendo sanas y seguras y a que nuestros mares y ríos sigan estando limpios».
Por su parte, Hans Bruyninckx, director ejecutivo de la AEMA, ha dicho lo siguiente: «La calidad de las aguas de baño europeas sigue siendo alta tras cuatro décadas de medidas destinadas a prevenir y reducir la contaminación. La legislación de la UE no solo ha contribuido a aumentar la calidad general, sino que también ha contribuido a identificar ámbitos en los que es necesaria una actuación específica».
Dos tercios de las zonas de baño están situadas en las costas europeas. Los resultados son una buena pista de dónde pueden encontrar los bañistas las aguas de baño de mejor calidad. En la evaluación actual no pudo clasificarse la calidad de varias aguas de baño, ya que las restricciones debidas a la pandemia no permitieron recoger un número adecuado de muestras.
En 2020, 296 zonas de baño europeas, es decir, un 1,3 %, eran de mala calidad. Aunque el porcentaje de zonas de mala calidad ha disminuido ligeramente desde 2013, persisten los problemas, especialmente a la hora de evaluar las fuentes de contaminación y de implantar medidas integradas de gestión del agua. En las zonas de baño en las que es difícil hallar el origen o las causas de la contaminación, es necesario realizar estudios especiales sobre las fuentes de contaminación.
Como parte del Plan de acción «contaminación cero» y en consonancia con la Estrategia sobre biodiversidad, la Comisión ha iniciado recientemente una revisión de la Directiva sobre las aguas de baño. El objetivo es evaluar si las normas actuales siguen siendo adecuadas para proteger la salud pública y aumentar la calidad del agua o si es necesario mejorar el marco existente, en particular abordando nuevos parámetros. Como parte de este proceso, la Comisión se pondrá pronto en contacto con las partes interesadas a través de una consulta pública en línea.
Las conclusiones del Informe de este año se presentarán el 2 de junio en una sesión de la Semana Verde de la UE, centrada este año en la contaminación cero. Junto con el Informe de este año sobre las aguas de baño, la AEMA ha publicado también un mapa interactivo actualizado que muestra los resultados de cada zona de baño. Los informes actualizados de cada país también están disponibles, así como información adicional relativa a la aplicación de la Directiva en cada uno de ellos.
Contexto
La calidad de las aguas de baño ha mejorado enormemente en los últimos 40 años, gracias, entre otras cosas, a la Directiva de la UE relativa a las aguas de baño. El control y la gestión eficaces aplicados en virtud de la Directiva, junto con otros actos legislativos de la UE en materia de medio ambiente, como la Directiva sobre el tratamiento de las aguas residuales urbanas (1991), han dado lugar a una reducción drástica de las aguas residuales industriales y municipales no tratadas o tratadas parcialmente que se vierten en las aguas de baño. Como consecuencia de ello, un número creciente de zonas ha sido testigo de una reducción de la contaminación, lo que ha provocado una mejora considerable de la calidad del agua. La revisión en curso de la Directiva sobre el tratamiento de las aguas residuales urbanas está evaluando cómo pueden adoptarse medidas más adecuadas en toda la UE para hacer frente de forma coherente a los desbordamientos de aguas residuales, en particular a la luz de los efectos del cambio climático.
Todos los Estados miembros de la UE, más Albania y Suiza, controlan sus zonas de baño con arreglo a las disposiciones de la Directiva de la UE relativa a las aguas de baño.
La legislación determina si la calidad de las aguas de baño puede calificarse como «excelente», «buena», «suficiente» o «insuficiente» en función de los niveles de bacterias fecales detectadas. Si la calidad de las aguas se clasifica como «insuficiente», los Estados miembros deben realizar ciertas actuaciones, como prohibir el baño o publicar un aviso aconsejando no bañarse, facilitar información al público y tomar las medidas correctoras adecuadas.
Más información
Evaluación de la calidad de las aguas de baño de 2020, que incluye informes por país y un mapa interactivo.
Próxima consulta pública sobre la Directiva sobre las aguas de baño.
Normas de la UE sobre calidad de las aguas de baño.
1 junio 2021
EEA AEMA