Se revela la verdadera magnitud del impacto del carbono en los viajes de larga distancia
La realidad del impacto climático de los viajes de pasajeros de larga distancia ha sido revelada en una nueva investigación realizada por los científicos.
A pesar de que solo representan menos del 3% de todos los viajes de los residentes del Reino Unido, los viajes de más de 80 km (de ida) son responsables del 70% de todas las emisiones de carbono relacionadas con los viajes de pasajeros.
La disparidad es aún mayor cuando se consideran los viajes internacionales: representan solo el 0,4% del total de viajes, pero son responsables del 55% de las emisiones.
La nueva investigación, publicada en la revista Nature Energy, también muestra que centrarse en los viajes de larga distancia puede ser una forma más eficaz de abordar las emisiones que los esfuerzos actuales centrados en los viajes locales y de cercanías.
Los viajes de larga distancia en avión están aumentando rápidamente
Si bien el número de viajes nacionales de larga y corta distancia en automóvil ha disminuido ligeramente en los últimos 25 años, los viajes aéreos internacionales han aumentado significativamente, impulsados por un aumento en los viajes de ocio y para visitar a amigos y familiares.
El Dr. Zia Wadud, del Instituto de Estudios de Transporte y de la Escuela de Ingeniería Química y de Procesos de la Universidad, quien dirigió la investigación, dijo: "La escala del impacto de los viajes de larga distancia es realmente muy grande. El hecho de que solo menos del 3% de nuestros viajes sean responsables de alrededor del 60% de los kilómetros recorridos y del 70% de las emisiones muestra lo importante que son los viajes de larga distancia en la lucha contra el cambio climático. Es preocupante que los viajes de larga distancia, especialmente los vuelos, hayan aumentado; sin embargo, también ofrecen oportunidades".
Utilizando una nueva métrica que han creado, llamada sensibilidad a la reducción de emisiones, el equipo de investigación ha calculado qué tipos de viajes podrían modificarse para maximizar la reducción de las emisiones de carbono de los viajes de pasajeros, afectando al menor número de personas o viajes posible.
Mayor potencial al reducir los viajes de larga distancia
La investigación concluyó que si todos los viajes en coche de menos de 12 km se hicieran a pie o en bicicleta, se reducirían las emisiones de carbono en un 9,3 %. Sin embargo, para lograrlo sería necesario cambiar alrededor del 55 % de todos los viajes, ya que la mayoría de los viajes se realizan a nivel local y en coche.
Calculado dividiendo el porcentaje de reducción de carbono por el porcentaje de viajes alterados, la sensibilidad de reducción de emisiones para este cambio sería de sólo 0,17, la más baja registrada en el estudio.
Por el contrario, si todos los vuelos de menos de 1.600 kilómetros se trasladaran al ferrocarril, habría una reducción del 5,6% en las emisiones, pero solo el 0,17% de los viajes se verían afectados, lo que daría como resultado un valor de sensibilidad de 33,2.
En el extremo superior, teóricamente limitar a todos los que vuelan ahora a un solo vuelo de ida y vuelta al extranjero por año tendría un valor de 158,3, ya que muy pocos viajes se verían afectados.
Los investigadores subrayan que los posibles cambios son sólo sugerencias destinadas a hacernos tomar conciencia y reevaluar el impacto de nuestros viajes de larga distancia, más que propuestas políticas concretas.
El Dr. Muhammad Adeel, coautor del estudio que actualmente trabaja en el Centro de Transporte y Sociedad de la Universidad del Oeste de Inglaterra, añadió: "Si bien los esfuerzos por trasladar los viajes locales a modos de transporte más sostenibles son realmente positivos, al omitir las emisiones de la aviación de las estadísticas nacionales (como sucede actualmente en casi todos los países), no estamos obteniendo un panorama holístico e ignorando gran parte del problema".
Un llamado a repensar el impacto del carbono en nuestros viajes
Los investigadores también esperan que sus hallazgos puedan servir como motor para que los responsables de las políticas consideren cambios en la forma en que se asigna el esfuerzo a la hora de abordar el impacto de los viajes sobre el medio ambiente.
Los datos se recopilaron de la Encuesta Nacional de Viajes del Departamento de Transporte y de la Encuesta Internacional de Pasajeros, organizada por la Oficina de Estadísticas Nacionales.
La investigación también ofrece al público una idea del impacto que podría tener cambiar su comportamiento.
El Dr. Wadud añadió: "Lo importante, tanto a nivel político como personal, es que prioricemos los viajes de larga distancia relativamente menos frecuentes (sobre todo los vuelos) para lograr las mayores reducciones".
Referencia
Zia Wadud, Muhammad Adeel & Jillian Anable, Casting a long shadow: the role of long distance travel in carbon emissions from and decarbonisation of passenger travel, Nature Energy (2024). DOI: 10.1038/s41560-024-01561-3