Episodio de precipitaciones en España a finales de noviembre de 2020

Esta situación está generada y conducida por un chorro polar muy ondulado y serpenteante que va a conducir, generar y ubicar a una borrasca atlántica al oeste de la Península. Desde allí, y con su desplazamiento lento por el sur peninsular durante esta semana, va a generar o desarrollar un nuevo seno de bajas presiones en el área mediterránea, que va a prologar las lluvias a zonas del este y zonas del mediterráneo occidental.

Las lluvias pueden ser importantes en algunas zonas de Andalucía, zonas costeras valencianas y catalanas, así como en la cara sur de algunas zonas del Sistema Central y Sierra Morena. Las zonas menos afectadas por este episodio será algunas zonas del norte peninsular.

Canarias también se verá afectada por esta borrasca, llevando precipitaciones a las Islas, limpiando el aire del polvo sahariano que las sobrevuela y viento intenso en zonas altas.

Aunque hoy martes, 24 de noviembre, llegarán las primeras bandas con precipitación a Galicia y Golfo de Cádiz, será a partir del miércoles cuando los frentes atlánticos entren de oeste a este. La baja mediterránea se podría formar en la segunda mitad del 26 de noviembre, jueves.

Los mapas de probabilidad superior a 20 mm en 24 h de AEMET, nos pueden dar una idea de dónde se focalizarán las precipitaciones en Península y Baleares:

Diagnóstico a las 06 UTC del 24 de noviembre de 2020

Una potente y profunda borrasca situada al este de Canadá, se va a profundizar rápidamente y se dirigirá hacia el sur de Groenlandia. En este sentido, la pulsación cálida y húmeda hacia latitudes polares, hará ondular y amplificar el chorro polar. En contra partida, otra pulsación norte-sur se dará al oeste del Atlántico con una entrada seca y fría que nos afectará durante esta semana casi toda España.

El chorro polar que nos va afectar , generará una vaguada elongada y en su seno se desarrollará una borrasca atlántica muy activa que se irá cargando de humedad y con sistemas frontales muy activos.

Nótese en la siguiente secuencia, la intensa y profunda pulsación húmeda (y cálida) generada por al borrasca al este de Canadá hacia latitudes polares, y la contrapartida entrada seca (y fría) en el Atlántico occidental y hacia la Península, desde el punto de vista del agua precipitable total, TPW:

Aunque no hay lenguas de humedad o ríos atmosféricos intensos frente al oeste de la Península, la borrasca atlántica logrará reforzar y realzar las lenguas y humedades existentes para generar las precipitaciones generalizadas previstas.

Eso sí, en esta ocasión no existen zonas de alto contenido de humedad de origen subtropical (ríos de humedad), como en otras ocasiones en latitudes más bajas, donde la borrasca atlántica podría reorientar dichas lenguas y generar una entrada de ábregos puros y cargados de precipitaciones. Aún así, las precipitaciones serán generalizadas y localmente intensas.

El engranaje atmosférico funciona, y si algo explosivo ocurre en el Atlántico occidental, esto repercute tarde o temprano en el Atlántico oriental, y en particularmente a España.

Tendremos una semana movida en cuanto a precipitaciones y viento para terminar noviembre. Esperamos las precipitaciones como agua de otoño.