El efecto Fujiwhara entre dos agujeros negros

Recientemente se ha publicado la foto del primer agujero negro observado, pero ¿qué pasaría si hubiera dos muy cercanos?

Aunque es un tema de astronomía teórica, la interacción de dos agujeros negros tiene ciertas similitudes con un fenómeno observado en la naturaleza y en particular entre dos ciclones tropicales o sus vórtices respectivos: es el efecto Fujiwhara.

El efecto de Fujiwhara o interacción de Fujiwhara es un tipo de interacción entre dos ciclones o vórtices ciclónicos, que produce que "orbiten" uno en torno al otro. En determinadas ocasiones los dos ciclones interaccionan y después cada uno sigue su camino y, en otras ocasiones, el más grande absorbe al más pequeño, quedando solo uno.
En este video de pocos mas de unos segundos dos agujeros negros interaccionan, proceso que duraría miles de años. Al final sólo queda uno.

youtube video id=I_88S8DWbcU

Dos agujeros negros se fusionan. Crédito de simulación: Simulación de un proyecto de tiempos espaciales

Inspirado por la primera detección directa de ondas gravitacionales en 2015, este video de simulación se reproduce en cámara lenta, pero tomaría aproximadamente un tercio de segundo si se ejecuta en tiempo real.

Situados en un escenario cósmico, los agujeros negros se colocan frente a las estrellas, el gas y el polvo. Sus lentes de gravedad extrema hacen que la luz que hay detrás de ellos formen los anillos de Einstein. A medida que se acercan en espiral, esas lentes se transforman paulatinamente y finalmente se funden en una.

Las ondas gravitacionales, de otro modo invisible, generadas cuando los objetos masivos se unen rápidamente, hacen que la imagen visible se ondule y se agite tanto dentro como fuera de los anillos de Einstein, incluso después de que los agujeros negros se hayan fusionado.

Apodadas GW150914, las ondas gravitacionales detectadas por LIGO son consistentes con la fusión de 36 y 31 agujeros negros de masa solar a una distancia de 1.3 mil millones de años luz.

El único agujero negro final tiene 63 veces la masa del Sol, y las 3 masas solares restantes se convierten en energía en ondas gravitacionales.

Desde entonces, los observatorios de ondas gravitacionales LIGO y VIRGO han informado de varias detecciones más de la fusión de sistemas masivos, mientras que la semana pasada el Telescopio de Horizonte de Eventos informó la primera imagen a escala del horizonte de un agujero negro.

APOD

Esta entrada se publicó en Noticias en 20 Abr 2019 por Francisco Martín León