Decenas de muertos por incendios forestales en Chile
Chile ha declarado estado de desastre en varias regiones del centro-sur después de que una devastadora ola de calor provocara incendios forestales que dejaron, al menos, 23 muertos, según cifras provisionales. Algunos de los incendios siguen propagándose sin control
Muchas viviendas han resultado afectadas y cientos de miles de hectáreas de bosque han sido destruidas desde que estallaron los incendios a inicios de febrero de 2023.
Dos miembros de la tripulación de un helicóptero que combatía los incendios murieron en un accidente dijo el ministro de Agricultura de Chile, Esteban Valenzuela. El piloto era boliviano y el mecánico chileno.
La ministra de Interior de Chile informa que se ha realizado una petición de ayuda internacional para afrontar la catástrofe provocada por los incendios forestales.
El gobierno ha declarado estado de desastre en las regiones de Ñuble y Biobío, pero los incendios también han afectado las regiones del Maule y La Araucanía.
El presidente Gabriel Boric decidió suspender sus vacaciones para visitar la zona afectada, donde hay más de 232 incendios activos, muchos se consideran fuera de control.
Algunas personas murieron cuando las llamas envolvieron el camino por el que viajaban, mientras que los otros dos murieron en un accidente automovilístico , presumiblemente mientras intentaban escapar del infierno.
Los últimos datos apuntan a 23 muertos y más de 500 personas heridas. Las cifras pueden aumentar con el tiempo.
Más de 2.300 bomberos y 75 aviones participan en la lucha contra las llamas.
La declaración de un estado de desastre permite disponer de recursos adicionales para combatir una emergencia.
Nuble ha sido puesto en alerta roja, junto con siete municipios del Biobío.
La ola de calor, con temperaturas que alcanzan los 40 ºC, ha creado temores de que se repita el desastre de 2017 en el que incendios generalizados en la misma región dejaron 11 muertos, destruyeron 1.500 viviendas y afectaron 467.000 hectáreas de bosque. Además de todo ello, Chile vive un largo periodo de sequía que ha ayudado a favorecer los incendios actuales.
Desde algunos estamentos y medios de comunicación se critica el modelo de gestión forestal chileno y la falta de medios para los bomberos forestales del país.