Cambio del patrón atmosférico a gran escala sobre Europa
De una configuración omega estacionaria a un predominio incipiente de los flujos de los oestes
Después de la situación de bloqueo anticiclónico en omega, que prevaleció durante la segunda quincena de febrero de 2019 y que dejó muchos récords de temperaturas, la circulación meteorológica está evolucionando estos días, a un régimen más “normal” de los oestes.
Las temperaturas han bajado en gran parte de Europa occidental después del episodio de altas temperaturas de récords absolutos a finales de febrero, y se mantendrán en valores algo más normales. Y todo ello como consecuencia del colapso de la situación omega y al paso de una situación de oestes.
Por lo tanto, para este comienzo de la primavera meteorológica, una sucesión de borrascas traerán vientos húmedos, suaves y precipitación, salvo en la zona mediterránea. Algunos frentes podrían afectar a algunas zonas de la Península.
Adiós omega, adiós
Los países de Europa occidental se están viendo aliviados por un patrón atmosférico más normal para esta época del año.
La última quincena de febrero gran parte de Europa occidental se vio afectada por una situación de bloqueo anticiclónico estacionario. El flujo del sur trajo récords de temperaturas desde Escandinavia a España, pasado por Reino Unido, Francia, Alemania, etc. La contaminación del aire se disparó en las grandes ciudades y zonas industrializadas. Una primavera adelantada se vivía en toda regla con temperaturas máximas equivalentes a un mes de abril o mayo a finales del invierno climatológico.
Pero la corriente en chorro, allá en altura, ha vuelto con una situación más normal: la situación de bloqueo ha desaparecido y ahora la corriente en chorro toma una configuración de oestes, abriendo las puertas a las borrascas y frentes asociados. Los países más “beneficiados” serán los de Europa occidental y central más septentrionales, o de latitudes más altas.
En la Europa del sur las presiones relativamente altas asegurarán un tiempo seco y soleado con la llegada esporádica de algún frente atlántico en la zona oeste.
La precipitación media prevista a 10 días por el modelo EPS-ECMWF nos pone de manifiesto la entrada de borrascas por países que hace unos días no veían ninguna nube.