2019 ha sido el 2º año más cálido de la historia, según Copernicus
Copernicus: 2019 ha sido el segundo año más cálido de la historia y el último lustro ha sido el más caluroso
Los datos publicados por el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S) muestran que 2019 ha sido el segundo año más cálido de la historia en el marco de unos años excepcionalmente calurosos a escala mundial, mientras que las concentraciones de CO2 siguen aumentando
El Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S) anuncia hoy que 2019 fue el quinto de una serie de años excepcionalmente calurosos y el segundo año más cálido de la historia a escala mundial. Por otro lado, Europa registró su año más cálido de la historia por un estrecho margen. Además, junto con el Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus (CAMS), el C3S también informa de que las concentraciones de CO2 en la atmósfera han seguido aumentando. Estos datos ofrecen la primera panorámica completa a escala mundial sobre las temperaturas y los niveles de CO2 en 2019. Los resultados concuerdan con las proyecciones anteriores de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Proyecto Mundial sobre el Carbono (GCP) para 2019. La OMM estimó que 2019 probablemente sería el segundo o tercer año más cálido de la historia, y tanto la OMM como el GCP indicaron que las concentraciones atmosféricas de CO2 habían seguido aumentando.
El C3S y el CAMS se implementan por medio del Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio (CEPMPM) en representación de la Unión Europea. Sus servicios ofrecen datos de calidad garantizada sobre las temperaturas y las concentraciones de CO2 de 2019, entre otras muchas variables climáticas. Ello ayuda a los responsables políticos, las organizaciones y las personas a tomar decisiones informadas sobre la mitigación del cambio climático y la calidad del aire que respiramos.
El conjunto de datos sobre la temperatura proporcionado por el C3S muestra que, en 2019, la temperatura media a escala mundial del aire en superficie fue 0,04° C inferior a la de 2016, el año más cálido de la historia.
Los datos también ponen de manifiesto que:
- Los cinco años más cálidos de los que se tiene constancia han sido los del último lustro, con 2019 que se perfila como el segundo año más caluroso. Asimismo, la década de 2010 a 2019 ha sido la más cálida de la historia.
- La temperatura de 2019 fue casi 0,6° C más cálida que la media del periodo comprendido entre 1981 y 2010.
- La temperatura media de los últimos cinco años ha sido entre 1,1 y 1,2° C superior al nivel preindustrial según lo definido por el IPCC, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático.
- Europa registró el año natural más caluroso de su historia, con temperaturas ligeramente por encima de las de 2014, 2015 y 2018.
Además, según las mediciones vía satélite de las concentraciones de CO2 en la atmósfera a escala mundial:
- Las emisiones de CO2 continuaron aumentando en 2019 y se incrementaron en 2,3± 0,8 ppm
El mayor calentamiento frente a la media del periodo 1981-2010 se produjo en Alaska y en amplias zonas del Ártico. La mayoría de las zonas continentales registraron temperaturas superiores a la media, especialmente Europa oriental y meridional, África meridional y Australia. En cambio, el centro y el sudeste de Canadá experimentaron temperaturas anuales inferiores a la media.
En Europa, todas las estaciones fueron más cálidas de lo habitual, y el verano y el otoño fueron los cuartos más calurosos de los registros. Ninguna de las estaciones batió récords en términos de temperatura media, pero el Viejo Continente registró su año natural más cálido de la historia, con temperaturas ligeramente superiores a las de 2014, 2015 y 2018. Copernicus presentará un análisis más detallado sobre el clima en Europa en su informe Estado del Clima Europeo de 2019, que previsiblemente se publicará en abril.
«2019 ha sido otro año excepcionalmente cálido. De hecho, se trata del segundo año más caluroso a escala mundial de nuestro conjunto de datos, y muchos meses han batido récords en este sentido», comenta Carlo Buontempo, responsable del Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S). «El conjunto de datos sobre la temperatura del C3S para 2019 es el primer conjunto de datos completo que se publicará, e incluye anomalías anuales y campos con promedios mundiales. Todo esto es posible porque somos un programa operativo y procesamos diariamente millones de observaciones terrestres, marinas, aéreas y satelitales. Empleamos un vanguardista modelo informático para hacer un compendio de todas estas observaciones, de manera similar al método utilizado para realizar las predicciones meteorológicas.»
Jean-Noël Thépaut, director del CEPMPM de Copernicus, explica: «Los últimos cinco años han sido el lustro más cálido de la historia y la última década, la más calurosa de la que se tiene constancia. Sin lugar a dudas, se trata de señales alarmantes. Que uno o varios meses registren una temperatura muy superior al periodo de referencia reciente puede resultar desconcertante, pero no representa en sí mismo una tendencia climática, dado que las desviaciones de la temperatura mensual varían y algunas regiones pueden mostrar parámetros inferiores a la media durante un tiempo. Generamos datos a diario gracias una cobertura completa a escala mundial de la temperatura y publicamos resúmenes mensuales y anuales sobre la base de este conjunto de datos, que actualmente se remonta a 1979. Para determinar posibles tendencias a largo plazo relacionadas con el cambio climático es indispensable contar con datos que abarquen amplios periodos del pasado. Por tanto, también cotejamos nuestros datos con información sobre el clima que data de la era preindustrial para determinar estas tendencias climáticas a largo plazo».
Sacar partido de las ventajas del reanálisis
Para producir datos de calidad garantizada, el C3S y el CAMS recurren al reanálisis, un método científico que tiene por objeto estimar las condiciones meteorológicas y la composición atmosférica de todos los días de las últimas décadas de la forma más precisa posible con base en multitud de observaciones.
Estas observaciones provienen de diversas plataformas o instrumentos, desde estaciones meteorológicas hasta globos y satélites meteorológicos. Por separado, ofrecen una panorámica incompleta sobre la atmósfera, dado que cada tipo de observación solo mide un aspecto concreto del clima o de la composición atmosférica, como la temperatura, el viento o la humedad, entre otros. Asimismo, las observaciones se distribuyen de forma irregular en el mundo y su número suele descender a medida que retrocedemos en el pasado.
El proceso de reanálisis combina todas las distintas observaciones disponibles para un día en concreto y genera una imagen completa en 3D sobre las condiciones en todo el mundo, para cada hora del día. Una vez agrupadas, estas imágenes de la composición atmosférica y de las condiciones meteorológicas a escala mundial ofrecen un exhaustivo registro histórico sobre el clima de la Tierra que puede utilizarse para monitorizar la velocidad a la que este está cambiando.
Las concentraciones de CO2 siguen aumentando
El análisis de los datos satelitales indica que las concentraciones de dióxido de carbono han seguido creciendo en los últimos años, incluido 2019. Las concentraciones de CO2 obtenidas vía satélite son representativas de la ratio de combinación de CO2 de la columna promedio, también denominado XCO2. El conjunto de datos es una combinación de dos conjuntos generados para el C3S y el CAMS.
Se calcula que la media de crecimiento anual del XCO2 para 2019 es de 2,3 ± 0,8 ppm al año. Este dato supera a la tasa de crecimiento de 2018, que se situó en 2,1 ± 0,5 ppm/al año, pero es inferior a los 2,9 ± 0,3 ppm/al año registrados en 2015. En 2015 se produjo un fenómeno meteorológico extremo —El Niño, que se tradujo en una tasa de crecimiento atmosférico superior debido a una absorción de CO2 atmosférico inferior a la normal por parte de la vegetación terrestre— y se generaron elevadas emisiones de CO2 derivadas de los incendios forestales que se produjeron, por ejemplo, en Indonesia.
Monitorización climática regular
Todos los años, el C3S ofrece una panorámica completa sobre el clima de nuestro continente en su informe Estado del Clima Europeo. En el informe, se analizarán más variables climáticas y eventos meteorológicos específicos del último año. El Estado del Clima Europeo de 2019 se publicará en primavera de 2020.
Además de los valores de temperaturas anuales, el C3S publica periódicamente boletines sobre el clima a principios de cada mes en los que expone las anomalías observadas en la temperatura del aire en superficie de todo el mundo, la cobertura de hielo marino y las variables hidrológicas. En este sentido, la última actualización climática del mes de diciembre desvela lo siguiente en relación con la temperatura del aire en superficie:
Temperatura del aire en superficie en diciembre de 2019:
- Las temperaturas a escala mundial fueron similares a las de diciembre de 2015, lo que convierte a estos dos meses, en conjunto, en los diciembres más calurosos en el registro de datos.
- La temperatura de diciembre de 2019 superó en más de 0,7° C la media de este mes para el periodo 1981-2010.
- La temperatura media en Europa fue 3,2° C más elevada que la del periodo de referencia estándar (1981-2010), por lo que este fue el diciembre más caluroso de la historia de Europa por un escaso margen
Puede descargar más información y gráficos de alta resolución sobre los datos para diciembre de 2019 a través del siguiente enlace: https://climate.copernicus.eu/climate-bulletins
Notas a redactores
Acerca de los datos sobre temperaturas
El mapa y los valores de datos citados provienen del conjunto de datos ERA5 del Servicio de Cambio Climático de Copernicus, del CEPMPM. Los promedios de área para la temperatura en la región europea abarcan únicamente la superficie terrestre y tienen las siguientes limitaciones de longitud y latitud: 25O-40E, 34N-72N.
El gráfico se basa en el conjunto de datos ERA5 y en otros cinco conjuntos de datos: JRA-55, generado por la Agencia Meteorológica de Japón (JMA); GISTEMP (versión 4), elaborado por la National Aeronautics and Space Administration (NASA) estadounidense; HadCRUT4, compendiado por el Met Office Hadley Center en colaboración con la Unidad de Investigaciones Climáticas de la Universidad de East Anglia, NOAAGlobalTemp (versión 5), generado por la National Oceanic and Atmospheric Administration (NOAA) de Estados Unidos, y la versión «recomendada» por Berkeley Earth de su conjunto de datos mensuales sobre la temperatura terrestre y marítima. Los conjuntos de datos ERA5 y JRA-55 abarcan hasta finales de 2019; los otros conjuntos solo están disponibles actualmente hasta finales de noviembre de 2019. Los datos se han consultado y procesado en gran medida según lo descrito en una publicación revisada por expertos (doi: 10.1002/qj.2949).
Cada conjunto de datos reflejado en el gráfico está alineado con vistas a presentar la misma temperatura media para el periodo 1981-2010 que el ERA5. En el caso del JRA-55, esto implica una reducción de la temperatura de 0,1 °C. Los demás conjuntos de datos se definieron originalmente solo como valores relativos a periodos de referencia. HadCRUT4 es un conjunto de cien resultados posibles. La mediana y el rango del conjunto están graficados. El conjunto no refleja la incertidumbre asociada a una cobertura geográfica limitada, que es considerable en el caso de las primeras décadas.
El periodo 1981-2010 es el último periodo de referencia de treinta años definido por la Organización Meteorológica Mundial para calcular medias climatológicas. Se trata del primero de estos periodos en los que se dispone de observaciones satelitales de variables clave, como la temperatura de la superficie marina y la cobertura de hielo marino, para respaldar a escala mundial reanálisis meteorológicos completos como el ERA5.
La temperatura media climatológica del periodo preindustrial es 0,63 °C inferior a la media entre 1981 y 2010. Esto coincide con lo sugerido en el informe sobre «El calentamiento global de 1,5 °C» del IPCC, que estima que el aumento de temperaturas entre el periodo preindustrial (definido entre 1850 y 1900) y el periodo de veinte años comprendido entre 1986 y 2005 es de «0,63 °C (margen de variación de ±0,06 °C, dado que del 5-95% de los datos utilizados son susceptibles de interpretación)». La diferencia de la media de temperaturas anuales entre los periodos 1981-2010 y 1986-2005 no resulta significativa para la totalidad de los conjuntos de datos aquí presentados (de -0,009 °C a +0,004 °C).
Los conjuntos de datos concuerdan en gran medida en cuanto al considerable incremento de las temperaturas a escala mundial durante las últimas cuatro décadas, y existe una mayor incertidumbre respecto de los cambios registrados en décadas anteriores, que no se han podido observar igual de bien. La diferencia entre las medias globales de los diferentes conjuntos de datos también ha sido relativamente significativa en los últimos tres años. Durante este periodo, las temperaturas medias a doce meses en relación con el periodo 1981-2010 de ERA5 son, por lo general, superiores a aquellas de los otros cinco conjuntos de datos, concretamente, entre 0,03 °C y 0,14 °C más elevadas en los últimos doce meses (hasta noviembre de 2019) para los que se pueden efectuar comparaciones. Ello se debe en parte a las diferencias en la medida en que los conjuntos de datos representan las condiciones relativamente cálidas que han predominado en el Ártico y en los mares alrededor de la Antártida, aunque las diferencias en las estimaciones tanto de la temperatura de la superficie marina en otras regiones como de la temperatura sobre la tierra fuera del Ártico han constituido factores adicionales que explican este fenómeno.
El conjunto de datos de ERA5 difiere de otros conjuntos de datos en que presenta una tendencia de enfriamiento en el norte y noreste de Groenlandia. Esta tendencia está vinculada a anomalías positivas (cálidas) en la temperatura de invierno en los primeros diez años aproximadamente del periodo de referencia (1981-2010) que no se han registrado en otras estimaciones para esta región. Estas temperaturas anómalas podrían estar relacionadas con unos valores dudosamente reducidos en la cobertura fraccional de hielo marino especificado en ERA5 en aquel entonces. Como resultado de ello, las anomalías negativas (frías) en la media anual de esta región deben interpretarse con prudencia.
Acerca de los datos sobre concentraciones de dióxido de carbono
Presentamos una serie cronológica de medias mundiales mensuales de dióxido de carbono atmosférico (CO2) a partir de sensores satélite. Las concentraciones de CO2 obtenidas vía satélite son representativas de la ratio de combinación de CO2 de la columna promedio, también denominado XCO2. Los promedios anuales indicados en el gráfico se obtienen calculando la media de los valores mensuales.
Dado que las capas atmosféricas más altas, como la estratosfera, suelen contener menos CO2, es normal que los valores de XCO2 sean ligeramente inferiores a las concentraciones de CO2 medidas cerca de la superficie terrestre. Por ello, los valores satelitales de XCO2 son similares, pero no exactamente idénticos a las estimaciones basadas en las observaciones en superficie, que constituyen la base de los informes de la OMM y del Proyecto Mundial sobre el Carbono (GCP).
Los datos para el periodo 2003-2018 son el resultado consolidado de «los datos de XCO2 del C3S procedentes de sensores satelitales», generados por el Servicio de Cambio Climático de Copernicus. El registro de datos climáticos de alta calidad del C3S se ha generado fusionando un compendio de conjuntos de datos individuales obtenidos vía satélite procedentes de los instrumentos satelitales SCIAMACHY/ENVISAT, TANSO-FTS/misión OCO-2 del proyecto GOSAT de la NASA, mediante productos generados por el C3S y ESA GHG-CCI en Europa, la NASA en Estados Unidos y NIES en Japón. Este producto combinado, en formato Obs4MIPs (consulte la web de Obs4MIPs en https://esgf-node.llnl.gov/projects/obs4mips/ ), se amplía cada año un año más, y los datos de 2019 estarán disponibles a finales de 2020. Para obtener más información, véase Reuter et al., 2019 (https://www.atmos-meas-tech-discuss.net/amt-2019-398/ ).
Los datos de 2019 son un producto preliminar prácticamente en tiempo real de los «datos sobre XCO2 del CAMS procedentes de sensores satelitales», generados por el Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus. Este producto de datos ha sido generado por TANSO-FTS/GOSAT. Para obtener más información, véase Heymann et al., 2015 (https://www.atmos-meas-tech.net/8/2961/2015/amt-8-2961-2015.html ).
Las tasas de XCO2 se han calculado con el método de Buchwitz et al., 2018 (https://www.atmos-chem-phys.net/18/17355/2018/ ).
Acerca del CEPMPM y Copernicus
Copernicus es el programa insignia de observación de la Tierra de la Unión Europea que opera a través de seis servicios temáticos: atmósfera, mares, tierra, cambio climático, seguridad y emergencias. Ofrece servicios y datos operativos de acceso libre que brindan a los usuarios información fiable y actualizada sobre el planeta y el medio ambiente. La Comisión Europea coordina y gestiona el Programa, que se implementa en colaboración con los Estados miembro, la Agencia Espacial Europea (AEE), la Organización Europea para la Explotación de Satélites Meteorológicos (EUMETSAT), el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio (CEPMPM), las Agencias de la UE y Mercator Océan, entre otros.
El CEPMPM opera dos servicios del programa insignia de observación de la Tierra de la Unión Europea: el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S) y el Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus de Copernicus (CAMS). También contribuye al Servicio de Gestión de Emergencias de Copernicus (CEMS). El Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio (CEPMPM) es una organización independiente intergubernamental conformada por 34 países. Constituye tanto un instituto de investigación como un servicio que opera de forma ininterrumpida para producir y divulgar predicciones meteorológicas numéricas a sus Estados miembro. Estos datos están totalmente disponibles para los servicios meteorológicos nacionales de dichos Estados miembro. El superordenador (y su archivo de datos) del CEPMPM es uno de los más potentes de su tipo en Europa y los Estados miembro pueden utilizar el 25% de su capacidad para sus propios fines.
Web del Servicio de Cambio Climático de Copernicus: https://climate.copernicus.eu/
Web del Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus: http://atmosphere.copernicus.eu/
Más información sobre Copernicus: www.copernicus.eu
Web del CEPMPM: https://www.ecmwf.int/
Contactos para prensa:
Nuria López
Communications Account Officer
Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio
Shinfield Park, Reading, RG2 9AX, Reino Unido
Correo electrónico: [email protected]
Teléfono: +44 (0)118 949 9778
Móvil: +44 (0)7392 277 523
Twitter: @CopernicusECMWF
Nota de prensa
Reading, 8/1/2020
Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S) ECMWF