Más de 2.800 muertos y 7.000 desaparecidos en Libia por las inundaciones del ciclón Daniel
La borrasca mediterránea Daniel, que llegó a tener características de ciclón mediterráneo subtropical, ha dejado más de 2800 muertos y miles de desaparecidos tras su paso por Libia, según cifras provisionales
Daniel deja inundaciones históricas y multitud de muertos y desaparecidos
Las inundaciones en Libia han sido históricas tras el paso de Daniel. La ciudad de Derna fue el centro de los desastres y según fuentes gubernamentales se han contabilizado más de 2.000 muertos y miles de desaparecidos, algunas cifras provisionales apuntan a unas 5.000 personas.
El primer ministro Ossama Hamad dijo que se temía que más 2.000 personas hubieran muerto en la ciudad oriental de Derna, y que miles más están desaparecidas.
Las lluvias torrenciales se acumularon en las presas locales, de las cuales dos colapsaron sumergiendo gran parte de la población de la ciudad.
Derna tiene los servicios públicos interrumpidos, sin luz y sin comunicaciones. Otras ciudades libias norteñas afectadas fueron Bengasi, Sousse y Al-Marj.
La borrasca Daniel: su triste historia
La borrasca Daniel afectó anteriormente a zonas de Bulgaria, Turquía y, sobre todo, Grecia donde en zonas centrales del país heleno se registraron acumualciones de 1.000 litros, entre el 4 y 8 de septiembre de 2023, con algunas decenas de muertos y grandes pérdidas económicas.
Posteriormente, Daniel se desplazó hacia Libia sobre las aguas cálidas del Mediterráneo llegando a ser un ciclón mediterráneo con características (sub)tropicales, siendo un posible medicane o, al menos, un ciclón subtropical.
Con tormentas y lluvias intensas, el ciclón impactó en el norte de Libia sobre el 9 y 10 de septiembre dejando inundaciones y acumulaciones históricas en zonas del norte del país.
Daniel se desplazó hacia el norte de Egipto el 11 de septiembre llevando asociada tormentas, algunas lluvias intensas y polvo en suspensión.
La crisis libia agudiza los trabajos de rescate
Hay que recordar que Libia sufre una crisis política e institucional desde 2014, ya que el país norte africano está dividido entre dos administraciones enfrentadas con unos servicios públicos parcialmente colapsados que están dificultado la coordinación y la respuesta efectiva en esta emergencia humanitaria.