19 años contra el calentamiento global antropogénico desde el Acuerdo de París ¿Dónde estamos?
A fecha de hoy, en el octavo aniversario de su firma, corremos el riesgo de superar ese punto de referencia en febrero de 2034, según una extrapolación de datos basada en sobre datos del Servicio de Cambio Climático Copernicus.
Actualmente, y desgraciadamente, muchos otros indicadores se han puesto rojos desde el Acuerdo de París. Veamos algunos de los más importantes, según Copernicus.
El tiempo se acorta si queremos mantener las temperaturas globales por debajo de 1,5°C en comparación con el promedio preindustrial. Una aplicación desarrollada por C3S - Copernicus lo muestra muy claramente.
En 2015, cuando los delegados de la COP firmaron el acuerdo de París, nuestros datos estimaron que la temperatura global estaba 0,98°C por encima del promedio preindustrial y habría superado el umbral de 1,5°C en 2045. Hoy, mientras los delegados abordan el primer balance global, un inventario crítico de las acciones y compromisos del Acuerdo de París para evaluar los avances realizados, los mismos datos estiman que hemos alcanzado un promedio global de 1,25°C y estaremos 1,5°C por encima de los niveles preindustriales en 2034. Y esta extrapolación, No tiene en cuenta las temperaturas récord de noviembre de 2023.
Dicho de otra manera, en 2015 faltaban 30 años para alcanzar nuestro ambicioso plazo. Ahora sólo faltan 11 años.
El calentamiento global se ha acelerado
Los datos sugieren que en los últimos siete años, se nos ha acabado rápidamente el tiempo: hemos acelerado 19 años el cronograma esperado debido a una combinación de aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero y eventos de variabilidad natural como El Niño, que calienta el clima.
La aplicación de 1,5°C muestra que la ventana de tiempo para alcanzar 1,5°C se cerró rápidamente entre 2015 y 2021, ligada a una combinación de eventos: una serie de años cálidos récord; altas emisiones de GEI y variabilidad natural. Desde entonces, la distancia hasta el umbral de 1,5°C se ha mantenido en unos 12 años desde el presente. Estas extrapolaciones hacia el futuro nos dan una estimación del ritmo del calentamiento global antropogénico y la ventana de cierre para la acción climática para mantener el clima global por debajo de 1,5ºC.
Aunque extremadamente preocupante, este resultado no es sorprendente dado el continuo aumento de las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera que, según todas las expectativas, marcarán nuevos máximos este año.
Buenas noticias respecto al Metano
No todo son malas noticias, algunos sectores y regiones se han adaptado considerablemente. El Servicio de Monitoreo de la Atmósfera de Copernicus (CAMS) proporciona estimaciones casi en tiempo real de las emisiones de CO2 para la Unión Europea y el Reino Unido en asociación con Carbon Monitor.
Algunos sectores han reducido significativamente las emisiones, pero estos esfuerzos no se traducen en una disminución global de las concentraciones.
Los años transcurridos desde la firma del Acuerdo de París han sido los más cálidos según los registros de datos climáticos que se remontan a 1940, pero la diferencia de 2023 destaca muy claramente.
El cambio climático inducido por el hombre ya está aquí y nos afecta
En nuestra actualización mensual de diciembre de 2015 , utilizando una climatología diferente (1981-2010) como referencia, consideramos el período de 12 meses como el más cálido registrado por un amplio margen. Desde entonces, hemos observado los años más cálidos registrados en 2016, 2019 y 2020, y ahora, prácticamente con certeza, 2023 será mucho más cálido. Esta cascada de registros es probablemente uno de los indicadores más significativos de que el cambio climático está aquí y el umbral de 1,5°C se acerca rápidamente.
La aparente aceleración del calentamiento global desde la firma del Acuerdo de París también se refleja en reguladores clave de la temperatura de nuestro planeta, como los océanos y el hielo marino. El Ártico registró su extensión más baja en 2020, seguido de 2019 y 2012.
La diferencia con el promedio es más sorprendente en el hielo marino de la Antártida, como se muestra en el cuadro siguiente. En octubre pasado, el hielo marino de la Antártida estaba un 11% por debajo del promedio del período 1991-2020. El récord anterior fue un 5% inferior, en 1986.
El IPCC organizó una extensa sesión sobre los objetivos de temperatura a largo plazo durante el primer día de la COP28. El director de C3S, Carlo Buontempo, presentó algunos de los datos más recientes del servicio y fue una oportunidad para confirmar cómo los conjuntos de datos de diferentes organizaciones coinciden en la rápida aceleración de la tendencia al calentamiento global en los últimos años.
Independientemente de las diferencias entre los datos de diferentes organizaciones y los matices entre los conjuntos de datos con respecto al punto de referencia de 1,5°C, al final calcular si alcanzaremos los 1,5°C en 2034 o 2036 no es tan importante. Lo que importa es qué tan rápido nos acercamos a ese umbral, un nivel de calentamiento que transformará nuestro clima.
Dado que los resultados del primer balance global muestran que las promesas de las Partes de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero están muy lejos del objetivo de mantener "el aumento de la temperatura media global este siglo muy por debajo de los 2 ºC" y "impulsar los esfuerzos para limitar el aumento de la temperatura incluso más a 1,5 ºC”. Los datos son muy claros: el tiempo se acaba muy rápidamente.