¿Qué tiempo hará en la segunda quincena de septiembre?
En general estas próximas dos semanas se van a caracterizar, primeramente, por tiempo inestable en la mayoría de las regiones, para terminar con una situación más estable y temperaturas altas. Lo vemos con detalle.
Septiembre empezó con temperaturas máximas elevadas, de hasta 38 o 39 ºC en el suroeste peninsular, llegando el día 5 a los 40,1 ºC en El Granado, Huelva. Sin embargo, el refranero ya avisa con sus predicciones: “Por la Virgen Melonera (día 8), verano fuera” y el día 6 tuvimos ya las primeras heladas en la meseta norte, con -0,7 ºC en Ucero, Soria.
En los últimos días de esta primera quincena ha aparecido la temida DANA en el Mediterráneo, con precipitaciones que han superado los 200 l/m2 en el norte de la isla de Mallorca y en zonas del extremo sudeste peninsular.
Astronomía quincenal
Referido a los datos astronómicos para esta segunda quincena de septiembre, ya perdemos entre 2 y 3 minutos al día en las horas de sol, llegando a las 11 horas 50 minutos. Además, el Sol sigue descendiendo, concretamente 6º, alcanzando los 46º 54’ a final de mes.
Hay que destacar que el día 23 dará comienzo el otoño, a las 9 horas 50 minutos hora peninsular. Estación que durará 89 días y 20 horas, terminando el 22 de diciembre, momento en el que comenzará el invierno.
Por tanto, está a punto de llegar el equinoccio de otoño, momento en que las horas de día y de noche se igualan, por lo que el calor acumulado durante el día sí tiene tiempo de disiparse. Además, la altura del Sol ya no es tan elevada y su calor es menos concentrado, por lo que las opciones de entradas frías empiezan a aumentar y los embolsamientos fríos pueden llegar hasta la Península con más facilidad. De todas maneras aún habrá momentos de calor, que también pueden ser noticia durante las próximas semanas.
Del mes que entra con abad (san Gil) y sale con fraile (san Jerónimo), Dios nos guarde
Para el lunes 16 existe considerable incertidumbre con la posición de la DANA, lo más probable es que se mantenga la inestabilidad en la mitad norte de la Península, con precipitaciones acompañadas de tormenta, principalmente en áreas de montaña. Eso sí, en principio se espera que sean de menor intensidad y extensión que las de días anteriores. De forma más débil y menos probable, las lluvias afectarán a parte de la mitad sur, no esperándose ni en el oeste de Galicia, ni en los extremos este de Cataluña, sur de Andalucía y de Murcia, tampoco en ninguno de los archipiélagos. Las temperaturas, en general, serán ligeramente más bajas de lo normal en estas fechas.
El martes 17 la inestabilidad más importante parece que corresponderá al extremo septentrional peninsular, comunidades de Cataluña, Valenciana y zonas aledañas, con precipitaciones acompañadas de tormenta que aún podrían ser localmente fuertes en el área mediterránea. En el resto del país es probable que también se produzcan algunas lluvias, con la salvedad de los extremos suroeste peninsular y noroeste de Galicia, así como en Canarias, donde no se esperan y predominará el cielo poco nuboso. Las temperaturas subirán en la vertiente atlántica y se mantendrán sin cambios en las demás regiones.
Entre los días 18 y 21 la incertidumbre en los modelos aumenta, aunque la mayoría de los escenarios dan todavía una DANA estacionaria sobre la Península, manteniendo la inestabilidad en la mayoría de las regiones, con precipitaciones irregularmente repartidas, con la salvedad del extremo suroeste peninsular donde en principio no se esperan. En Canarias predominarán los claros. Las temperaturas se mantendrán en valores dentro de la normalidad.
En septiembre, a fin de mes, el calor vuelve otra vez
Aunque con una incertidumbre aún mayor, todo parece indicar que los últimos días de este mes serán principalmente de estabilidad generalizada, quizás con los últimos coletazos del embolsamiento frío y precipitaciones en el extremo norte, área mediterránea y sistemas montañosos, que podrían provocar chubascos tormentosos irregularmente repartidos.
Las temperaturas se recuperarán y serán elevadas en la mitad norte y oeste peninsulares, así como en las Baleares, mientras que en Canarias serán algo inferiores a lo normal.