Riesgo ambiental para mañana y el viernes: así pueden afectar a tu salud las partículas perjudiciales de la calima
La ola de calor irá acompañada de una importante advección de polvo sahariano, que empeorará la calidad del aire. Los riesgos asociados a la calima no son pocos, siendo necesario tomar algunas medidas preventivas.
La dorsal africana responsable de la primera ola de calor del año impulsará vientos del sur en niveles altos de la troposfera, con transporte de polvo mineral procedente del desierto del Sáhara. Cuando el polvo en suspensión viaja en niveles altos de la troposfera, el riesgo para las personas es bajo, pero en episodios de calima como el previsto para los próximos días cabe extremar las precauciones.
Importante intrusión de polvo sahariano
Desde mañana miércoles y hasta el domingo, una lengua de polvo sahariano afectará a buena parte de la Península y ambos archipiélagos. El polvo podría rebajar algo las temperaturas máximas previstas, pero a cambio sufriremos una reducción importante de la calidad del aire.
Hasta el sábado, habrá concentraciones importantes de material particulado cerca de la superficie en la mitad sur, centro, este y ambos archipiélagos. El domingo, la llegada de una vaguada y vientos del norte, limpiará los cielos de norte a sur.
Según la AEMET, la calima es la suspensión en la atmósfera de partículas sólidas (arena, polvo, cenizas) que son extremadamente pequeñas e invisibles al ojo humano, pero en grandes concentraciones reducen la visibilidad en superficie. Las entradas de calima son habituales en zonas desérticas, subdesérticas y subtropicales, como las Islas Canarias.
La calidad del aire será mala en Andalucía, meseta sur y litoral sureste entre el jueves y sábado, debido a la combinación de calima con la escasa renovación del aire y el efecto contaminante de los grandes núcleos urbanos. El domingo, los peores índices de calidad del aire se trasladarán a la Comunidad Valenciana y Baleares a medida que la vaguada vaya desplazando la calima hacia el este.
Un riesgo para la salud
La exposición prolongada a la calima puede producir problemas respiratorios en personas sanas y cualquier exposición breve, complicaciones en individuos con patologías previas. Son habituales síntomas como la irritación de las mucosas, tos, picor ocular y congestión nasal. En los casos más graves pueden aparecer dolor torácico, crisis de asma y dificultades para respirar.
Especialmente peligrosas son las denominadas partículas PM2.5, es decir, aquellas con un diámetro de 2,5 micrómetros y que pueden ser inhaladas directamente, pasando a los pulmones. Estas partículas están presentes en los gases contaminantes emitidos por los coches y las actividades industriales, pero también en episodios de calima.
La Organización Mundial de la Salud, situá el límite de PM2.5 en 9 microgramos por metro cúbico como umbral sanitario. Las previsiones apuntan a que este umbral no se va a superar los próximos días en España, pero las PM10, las que se suelen tomar como referencia en eventos de polvo en suspensión, superarán localmente los 50 microgramos por metro cúbico.
Ante un episodio de calima como el previsto, es recomendable evitar realizar actividades en el exterior, especialmente practicar ejercicio físico al aire libre. Se recomienda también, mantener cerradas puertas y ventanas, ingerir suficiente líquido y en los casos más graves, hacer acopio de una mascarilla FPP2.