Pronóstico del tiempo para abril en España por Samuel Biener: ¿llegarán borrascas y danas con lluvias abundantes?
Marzo se despide con un nuevo temporal de lluvia, nieve y viento que ha asestado un duro golpe a la sequía en varias regiones. ¿Llegarán más borrascas o danas a España durante el mes de abril?
El mes de marzo se despide en España con un importante temporal de lluvia, nieve y viento asociado a la borrasca de alto impacto Nelson y varios centros secundarios más que danzan en el entorno de la Península.
Las precipitaciones han sido muy abundantes en varias regiones, impidiendo la celebración de muchas procesiones, pero llenando a su vez embalses que estaban en una situación ya dramática estos meses. La duda ahora reside en si seguirá este tiempo revuelto también en el mes de abril.
A pesar del refranero, abril no es de los meses más lluviosos en el conjunto de España
En pocas horas arranca el mes de abril, considerado uno de los más variables, encontrando uno de los dichos más populares del refranero: "en abril, aguas mil". Más allá de esto, destaca el aumento de las horas de luz, así como el ambiente más suave respecto a marzo, con heladas que suelen empezar a quedarse restringidas a las cordilleras.
A pesar del refranero, sólo en el interior este y zonas muy concretas de la vertiente cantábrica es uno de los tres meses más lluviosos del año. Eso sí, en esta época ya pueden producirse episodios de lo más diversos: desde el paso de frentes hasta el descuelgue de danas, con las primeras tormentas de cierta intensidad de la primavera. Tampoco desconoce importantes episodios de nieve.
Abril de 2024, más cálido respecto a la media en España
De acuerdo con las últimas previsiones de nuestro modelo de referencia, por ahora parece que la primera quincena de abril puede ser más cálida de lo normal para las fechas en prácticamente toda España. Las temperaturas podrían situarse entre 3 y 6 ºC por encima de la media de las fechas en muchas zonas de la vertiente mediterránea y en parte de la costa cantábrica. De cumplirse esta situación, hablaríamos de anomalías muy significativas.
En el resto de la Península y en ambos archipiélagos estarían entre 1 y 3 ºC más altas respecto al promedio de las fechas, excepto en algunos sectores del cuadrante suroccidental, donde las anomalías pueden ser algo menos significativas.
Para la segunda parte de abril, los mapas por ahora muestran una posible normalización térmica en gran parte de la vertiente atlántica, interior peninsular, Galicia y Cantábrico occidental. En cambio, en el litoral mediterráneo, sector oriental del Pirineo y en Canarias todavía se registrarían valores que se situarían entre 1 y 3 ºC por encima de la media.
En Baleares, Cantábrico oriental, gran parte de Andalucía y en el sector occidental del Pirineo las anomalías serían menos importantes para esas fechas, en torno a 1 ºC más respecto al promedio.
¿Se esperan lluvias abundantes?
En lo que respecta a las precipitaciones, es la variable más compleja de predecir, y más teniendo en cuenta la época en la que estamos, cuando ya empiezan a ganar terreno los chaparrones convectivos. Un sólo episodio de tormentas o una DANA pueden darle la vuelta al balance pluviométrico en cuestión de horas.
Según nuestro modelo de referencia, durante la próxima semana las precipitaciones serán más abundantes respecto a la media del mes en el noroeste peninsular, zonas de Galicia, noroeste de Castilla y León, vertiente cantábrica, norte de Navarra y del Pirineo. En cambio, en el centro, sur, ambos archipiélagos y en la costa mediterránea las lluvias estarían por debajo del promedio.
Y esta disposición podría extenderse al resto de la primera quincena. De confirmarse, continuarían predominando las situaciones atlánticas, al menos durante la primera quincena, lo que serían malas noticias para la costa mediterránea.
Primera quincena con predominio de situación de NAO +
Esta distribución de las anomalías térmicas y de pluviométricas nos hace pensar que en la primera parte del mes predominará un patrón de NAO +, con las borrascas circulando muy al norte, quedando la Península bajo la influencia del aire subtropicales y posibles ascensos de crestas anticiclónicas. Con este escenario, los frentes sólo dejarían precipitaciones de cierta entidad en el extremo septentrional.
Ya para la segunda quincena la incertidumbre es total y no se observa un patrón dominante determinado, pero a día de hoy no son descartables situaciones de bloqueo en latitudes altas, con posibles descuelgues o borrascas más cerca de nuestro entorno. Esperemos que las lluvias primaverales lleguen, ya que la sequía sigue agudizándose en la costa mediterránea cuando no falta mucho para el verano.