Muy pronto el patrón meteorológico de NAO- afectará al tiempo en España, según el ECMWF y la NOAA. ¿Qué significa esto?
El tiempo anticiclónico, con ausencia de precipitaciones, pero con heladas, nieblas y cencelladas está siendo la tónica general en el tiempo en España desde hace varios días. La NOAA y el ECMWF tienen claro que esto cambiará pronto.
El gran bloqueo anticiclónico está impidiendo la llegada de perturbaciones atlánticas y la estabilidad está siendo generalizada. Esto se está traduciendo en tiempo seco y soleado, con temperaturas agradables a mediodía, pero cayendo en picado durante las noches.
Las densas nieblas, algunas de ellas con cencellada, la amplitud e inversión térmica y las heladas, casi generalizadas, predominan en el panorama meteorológico nacional.
Pero esto parece tener los días contados. La NOAA, el ECMWF y la NAO lo tienen claro, el patrón meteorológico va a cambiar drásticamente.
Primeros cambios para fin de año y la NAO avisa para Reyes
El gran anticiclón que ocupa gran parte del continente europeo, bloqueando el paso de perturbaciones hacia nuestras latitudes y que desvía las borrascas hacia latitudes muy septentrionales, va a permitir que en su flanco meridional se acerque inestabilidad.
Este cambio va a venir de la mano de una DANA que se encuentra casi estacionaria en el norte de África y que va a provocar algunas precipitaciones en zonas de Valencia, Murcia, Baleares, ciudades autónomas y litoral andaluz .Las lluvias afectarán a las citadas zonas a partir del próximo lunes o martes, coincidiendo con el fin de año. Además, la nieve podría hacer acto de presencia en Sierra Nevada.
Después de este primer pequeño cambio, todo apunta a que la DANA se alejará y el anticiclón podría volver a asentarse, pero todo indica que será de manera transitoria, ya que importantes cambios a nivel sinóptico se están cocinando en la troposfera y la baja estratosfera, como comienza avisar la NAO.
¿Qué es la NAO?
El Índice de Oscilación del Atlántico Norte, también conocido como NAO (por sus siglas en inglés, North Atlantic Oscillation), describe la fluctuación de las presiones atmosféricas entre dos áreas de alta y baja presión en el océano Atlántico.
Estas áreas son la región subpolar, donde se ubica la baja presión, y la región subtropical, caracterizada por una alta presión. En nuestras latitudes, la borrasca de Islandia y el anticiclón de Azores, respectivamente.
El comportamiento del NAO tiene un impacto significativo en el tiempo de Europa, América del Norte y otras partes del hemisferio norte, lo que lo convierte en un elemento importantísimo para las predicciones a medio plazo en nuestras latitudes.
Fases principales
La NAO se clasifica en dos fases principales: la fase positiva y la fase negativa.
En general para el tiempo meteorológico en Europa, durante la fase positiva la diferencia de presión entre las borrascas en la zona de Islandia y las altas en Azores es mucho mayor.
Esto se suele traducir en vientos zonales del oeste más intensos, con temperaturas más suaves y predominando las lluvias en la fachada atlántica europea. Estas últimas acaban afectando o no a nuestro país dependiendo de la intensidad y ubicación final del anticiclón, aunque, en general, un índice NAO+ se traduce en tiempo estable en España.
La diferencia de presiones entre la zona de Islandia y Azores se reduce, provocando un debilitamiento de los vientos del oeste. Está relacionado con un vórtice circumpolar débil, de modo que se producen desalojos importantes de aire frío desde el polo norte hasta latitudes muy bajas y, a la par, intrusiones de aire cálido desde regiones subtropicales a zonas polares.
En Europa se traduce en condiciones mucho más frías y menos húmedas, y en España en general, aunque no siempre y en líneas muy generales, se traducen en temporales invernales de consideración.
NAO negativa arrancando 2025
La estadounidense NOAA pronostica una bajada considerable de este índice en los comienzos de enero de 2025.
El índice se ha mostrado positivo en gran parte del mes de diciembre, que se ha traducido en un gran bloqueo anticiclónico en Europa, impidiendo la llegada de perturbaciones atlánticas. La anomalía de presión positiva sobre el continente está siendo muy significativo traduciéndose en una gran estabilidad atmosférica.
Por tanto, no siempre el signo positivo o negativo se traduce en un patrón meteorológico fijo. El patrón positivo, hablando en términos climáticos medios, tendría que haberse traducido en una componente zonal intensa; la ha habido, pero transitando en latitudes muy altas. El vórtice polar ha estado muy fuerte en zonas subpolares.
CSE y ECMWF apoyan el pronóstico de la NOAA
Pues bien, ese patrón que comentamos está a punto de romperse. Aparte de la bajada del índice NAO, también se esta vislumbrando un calentamiento súbito estratosférico (CSE). Este fenómeno, aunque no siempre, suele extenderse a la troposfera y ocasionar desalojos importantes de aire frío desde el Ártico a latitudes bajas. El vórtice polar muestra signos de desestabilización.
Además, nuestro modelo de referencia, el ECMWF también señala a un cambio importante en el patrón meteorológico. Algunos escenarios probabilísticos apuntan a un desalojo acusado de aire frío que podría impactar en nuestra geografía. En cambio otros escenarios potenciarían un tiempo inestable pero menos frío, extendiendo las precipitaciones por gran parte de España y quedando el desalojo de aire frío en otras ubicaciones europeas.
Aún es pronto para dar nada por hecho, pero todo apunta a que la atmósfera se está preparando para un cambio de tiempo significativo, rompiendo la gran estabilidad atmosférica que ha estado reinando hasta ahora.
De producirse un gran desalojo de aire ártico sobre nosotros, no sería nada fuera de lo común; ya ha sucedido y volverá a suceder en el futuro. Las próximas actualizaciones meteorológicas nos lo confirmarán. Desde Meteored te lo iremos contando.