El calor regresará la semana que viene, aunque podría acabar con tormentas
Una dorsal móvil condicionará el tiempo de los próximos días dando lugar a una situación estable y con temperaturas diurnas prácticamente estivales. No obstante, es probable que no permanezca mucho tiempo con nosotros.
En las últimas horas seguimos bajo la influencia de la borrasca ex Danielle, o mejor dicho de sus remanentes, porque ya ni siquiera es una borrasca. Su circulación en niveles bajos prácticamente ha desaparecido y ahora sólo queda una vaguada en niveles medios y altos que está cruzando la Península y que se aleja hacia el Mediterráneo.
Tormentas intensas en el este y Baleares en las próximas horas
En las próximas horas esa vaguada permitirá el desarrollo de tormentas organizadas, fuertes o incluso severas en puntos de Cataluña, Comunidad Valenciana y especialmente Baleares.
Estas tormentas pueden venir acompañadas de granizo superior a 2 centímetros de diámetro, rachas de viento muy fuerte y chubascos capaces de acumular cantidades próximas a 60 l/m2 en menos de una hora.
Además, los núcleos convectivos disponen de mucha energía al desarrollarse sobre una masa de aire muy templada y húmeda generada por un Mediterráneo anormalmente cálido. Sin embargo, estos fenómenos adversos asociados a la vaguada desaparecerán durante el fin de semana en la mayor parte del país, dando paso a un periodo de estabilidad que durará varios días.
Tras la borrasca ex-#Danielle, vuelven las altas presiones por unos días y las temperaturas tenderán a ascender .
— Meteored | tiempo.com (@MeteoredES) September 16, 2022
Tendremos algunas excepciones el fin de semana: en el este, Baleares y Canarias no subirán y lloverá . pic.twitter.com/M9ufuMCvWu
La semana que viene vuelven los 35 ºC
Las temperaturas diurnas tenderán a subir y la semana que viene arrancará con máximas por encima de 25 ºC en amplias zonas de la Península y acercándose a los 35 ºC en las zonas más cálidas de la mitad sur. La nubosidad será escasa, con algunas nubes altas y de evolución diurna en zonas de montaña y los vientos en general soplarán flojos de dirección variable, predominando las brisas locales.
Tan sólo en el extremo noreste será posible algún desarrollo tormentoso disperso, en cierto modo favorecido por el paso de algunas ondas en niveles altos que rozarán el norte peninsular.
En Canarias, en cambio, la semana empezará con nubosidad abundante y algunas lluvias significativas en el interior de las islas. No obstante, según avance la semana, especialmente durante el miércoles y días posteriores, se impondrá el régimen de alisios y la nubosidad más compacta quedará restringida a puntos del norte de las islas de mayor relieve, permaneciendo los cielos poco nubosos en el resto.
Incertidumbre y probables tormentas a finales de semana
La dorsal anticiclónica no parece estable y es muy probable que a partir de mediados de semana pierda entidad o se desplace, permitiendo el acercamiento de alguna vaguada o depresión. Se espera un incremento de la nubosidad y una mayor probabilidad de chubascos o tormentas que afectarían especialmente al este peninsular, aunque con posibilidad de que puedan extenderse hacia el interior durante el fin de semana. Las temperaturas diurnas iniciarán un descenso.
Hay varios escenarios posibles, no obstante pocos contemplan la presencia de una dorsal anticiclónica sobre la Península, por lo que la probabilidad de que volvamos a tener una situación meteorológica más propia del otoño, con chubascos y temperaturas suaves, es elevada. Habrá que estar pendiente por tanto de la situación a partir del próximo jueves o viernes, ya que dependiendo de la posición de las vaguadas o sistemas de bajas presiones que puedan afectarnos, las regiones afectadas pueden cambiar significativamente.