La posible segunda ola de calor del año asoma por el horizonte de predicción, ¿45 ºC en España?
Según vayamos acercándonos a la canícula se intensificará el calor. Es probable que la próxima semana tengamos la segunda ola de calor del año.
El mes de julio ha comenzado por todo lo alto en lo que a temperaturas se refiere en el sur peninsular. Ayer lunes se rozaron los 40 ºC de máxima en diferentes localidades andaluzas como El Granado (Huelva) con 39,9 ºC, Montoro (Córdoba) 39,8 ºC, Córdoba (aeropuerto) 39,7 ºC o Andújar (Jaén) 39,5 ºC. El intenso calor compartió protagonistas con las fuertes tormentas que descargaron en el entorno del Sistema Central e Ibérico y otras zonas del este peninsular, produciéndose algunas granizadas muy destacadas, como la que afectó a la ciudad de Valencia.
Según nos vayamos acercando a mediados del mes de julio, lo normal (si atendemos a la climatología) es que el calor se intensifique, iniciándose la canícula. Este periodo no tiene fechas fijas, aunque la tradición popular suele situarlo entre el 15 de julio y el 15 de agosto (“De Virgen a Virgen, el calor aprieta firme”).
Desde hace algunos días el modelo del Centro Europeo, con el que trabajamos en Meteored, señala una situación propicia para que la próxima semana se produzca un significativo aumento de las temperaturas que, previsiblemente, disparará los termómetros hasta los 45 ºC, o incluso algún grado más, en algunas localidades españolas.
Como bien sabemos, la predicción más allá de 5-6 días casi siempre es arriesgada, ya que la incertidumbre aumenta a medida que estiramos el horizonte de predicción. Aunque las últimas salidas del modelo presentan una cierta dispersión en el alcance y la magnitud que alcanzará el episodio de altas temperaturas, parece claro que a partir del próximo fin de semana una dorsal de aire muy cálido comenzará a abrazar la mitad oriental peninsular, Baleares y Canarias. Es probable, no seguro aún, que sea el inicio de la segunda ola de calor del presente año.
El modelo probabilístico (predicción por conjuntos o ensembles), en algunos de sus miembros ha llegado a marcar temperaturas de hasta 48-49 ºC en el sur peninsular, justo en el inicio de la canícula. Otros miembros rebajan las máximas hasta 42-43º, mientras que una cantidad significativa de los mismos apuntan unas temperaturas en el entorno de los 45 ºC persistiendo varias jornadas, de ahí que señalemos la posible llegada de la ola de calor.
Calor intenso y fuertes tormentas
Los pasados meses de abril y mayo la predicción estacional del Centro Europeo ya apuntaba a que tendríamos un verano muy caluroso, con una probabilidad alta de temperaturas por encima de la media, con calor extremo transitorio. De momento se está cumpliendo, especialmente en el centro-sur peninsular y, por lo que acabamos de indicar, todo apunta a que tendrá su continuidad. También es muy probable que el período estival tenga precipitaciones por encima de la media, debido principalmente a las tormentas.
Esa actividad tormentosa está viéndose favorecida por una circulación atmosférica en nuestras latitudes que viene dictada por el bloqueo escandinavo, lo que permite que discurran con más frecuencia de la habitual en el verano ibérico de entradas de aire húmedo y descuelgues de aire frío en altura.
Las intensas tormentas coexisten con episodios muy destacados de intenso calor. Lo vimos el pasado mes de junio, en que tuvo lugar la primera ola de calor del año, y lo vamos a ver, previsiblemente, a medio plazo, con la segunda ola, en la que podrían batirse récords de máximas y de mínimas altas.