¿Habrá una gran borrasca invernal antes de que acabe enero?
Hace un año, Filomena y la posterior ola de frío nos dejaban registros históricos. El panorama es totalmente diferente en este mes de enero, pero... ¿podría volver a suceder algo parecido en la segunda quincena?¿Qué dicen las previsiones?
El año pasado por estas fechas en gran parte de España estábamos bajo los efectos de la borrasca de gran impacto denominada Filomena, que produjo cuantiosas y persistentes nevadas (entre el 6 y el 10 de enero) en cotas relativamente bajas, sobre todo en el centro y el este de la Península, además de fuertes vientos y bajísimas temperaturas que se mantuvieron hasta el día 17.
Los registros extremos que nos dejó Filomena
Llaman la atención los espesores de nieve que se midieron en La Pobla de Cérvoles (Lleida), con 63 centímetros, o en Cavacés (Tarragona), donde se alcanzaron los 57,4. También se superó el medio metro en el Roque de los Muchachos (Santa Cruz de Tenerife), con 56 centímetros, Madrid (Retiro) 52,9, Toledo 51 o Vilafranca (Castellón), donde rondaron el medio metro.
En cuanto a temperaturas mínimas las más bajas, destacaron los -26,5 ºC que se registraron en Torremocha del Jiloca (Teruel), en Bello (Teruel) -25,4 ºC, y en Molina de Aragón (Guadalajara) -25,2 ºC, si bien en otras estaciones no homologadas por Aemet de los Picos de Europa y del Pirineo de Lleida se registraron valores aún más bajos.
Tenemos que remontarnos a los primeros días de enero de 1971 para encontrar una borrasca de esa envergadura, aunque por aquel entonces no se denominaban de gran impacto ni se les ponía nombre.
Teniendo en cuenta que hacía cincuenta años que no se producía un evento similar y, sobre todo, lo que muestran los distintos modelos la probabilidad puede considerarse prácticamente nula.
¿Qué es lo que podría pasar en la segunda quincena de enero?
Las temperaturas van a ser bajas en casi toda la Península y en Baleares durante toda la quincena con heladas en casi todo el interior, aunque hasta el día 24 las excepciones serán la mitad occidental de Andalucía, el litoral mediterráneo y el oeste de Galicia, donde los valores termométricos también estarán por debajo de lo normal. Por supuesto, Canarias como casi siempre gozará de un ambiente mucho más suave con máximas ligeramente superiores a los 20 ºC y mínimas en torno a los 16 o 17 ºC.
En la semana siguiente las heladas seguirán produciéndose en casi todo el territorio, y pueden llegar a registrarse algunas, aunque débiles, en capitales del suroeste como Sevilla y Córdoba. Dada la situación anticiclónica, lo que sí es previsible es que se formen numerosos bancos de niebla que pueden ser persistentes en algunas zonas, principalmente en la meseta castellanoleonesa.
En cuanto a las precipitaciones, van a ser muy escasas. De producirse algunas en lo que resta de mes serán aisladas y de escasa intensidad. Las mayores probabilidades corresponderán a los Pirineos. También podría llover ligeramente en el norte del archipiélago canario.