La borrascas pronto cercarán España, un chorro polar muy ondulado avisa
Las altas presiones se situarán sobre el noroeste de Europa y permitirán que las borrascas se muevan por latitudes inferiores, pudiendo afectar a la península ibérica durante la segunda mitad de la próxima semana.
Durante los próximos días la situación continuará siendo relativamente estable en la península, con altas presiones centradas en el norte y anomalías térmicas positivas en todo el territorio. Estas anomalías serán en promedio moderadas, de entre 3 ºC y 6 ºC por encima de los valores normales en casi todas las regiones, aunque pueden rebasar los 8 ºC en puntos del norte.
El único evento significativo, a parte de estas temperaturas casi primaverales, es una pequeña depresión aislada que se ha instalado en el suroeste y que está dejando algunas precipitaciones, calima y vientos fuertes en puntos del sur peninsular.
Vista puesta en el vórtice polar tras el calentamiento súbito estratosférico
Más adelante, el foco de atención se ha centrado en la reciente inversión de los vientos zonales del vórtice polar estratosférico y, aunque todavía no está muy claro si puede ser una de sus primeras consecuencias o por el contrario no guardar relación alguna, se avecina un cambio de tiempo de cara a mediados y finales de la semana que viene.
Pese a que se trata de una previsión a largo plazo, la escasa dispersión que hay al respecto en los modelos es evidente y cada vez parece más claro que a partir del próximo 23 o 24 de febrero se producirá un cambio importante en nuestro entorno.
Durante el transcurso de los primeros días de la semana, las altas presiones empezarán a cobrar protagonismo en el Atlántico próximo y se irán propagando hacia el norte. Una gran vaguada se descolgará sobre el oeste de Europa y posiblemente, ya de cara al final de la semana y los últimos días del mes, quede aislada al extenderse las altas presiones por el norte del continente, formándose una amplia región de bajas presiones que podría afectar al sur.
Las bajas presiones llegarán a España
Aunque conocemos el escenario sinóptico y sabemos que en el entorno de la península se desarrollarán centros de bajas presiones, no es posible saber aún las consecuencias que tendrá a escala regional. Los modelos no son capaces de situar los centros de bajas presiones que puedan llegar a formarse a un plazo tan largo y la dispersión se dispara a estas escalas. Tampoco conocemos la duración que tendrá este escenario, aunque todo apunta que será una situación persistente o recurrente durante bastantes días.
Lo que sí parece evidente es que las altas presiones bloquearán la circulación del chorro polar en latitudes relativamente altas y las masas de aire frío tendrán bastante facilidad para descender de latitud, aproximándose a la península ibérica y situándonos en una zona de fuerte inestabilidad baroclina propensa a la formación de borrascas. Cabe esperar, por tanto, fluctuaciones en las temperaturas con posibles descensos generalizados de cara a finales de semana, así como episodios de precipitaciones, lluvias y nevadas, cuya distribución está aún por concretar.