30ºC, ¿dónde? Esto huele a verano

Llevamos unos cuantos días en terreno de nadie, con el anticiclón retirado al oeste y norte de Azores y las borrascas lejos, sobre Centroeuropa y Argelia, esta última en pleno desierto. La indefinición en estas fechas, y hasta septiembre, se suele saldar con temperaturas en ascenso ante la ausencia de ventilación. Hay muchas horas de sol y el calor va acrecentándose en superficie. Ayer ya tuvimos marcas de 30ºC en los observatorios de Sevilla o Andújar, en Jaén (AEMET).

Este mediodía la capital hispalense volverá a plantarse en los 30ºC y Córdoba llegará a los 31ºC. En Extremadura, la mayor parte de la provincia de Badajoz también rondará la treintena. El sur de la Meseta se mantendrá a en torno a los 25ºC y el norte por encima de los 20ºC. Sólo quedarán por debajo de la veintena el litoral cantábrico y curiosamente, también, Las Palmas de Gran Canaria.

Mañana las temperaturas registrarán un ligero ascenso en el extremo norte de la Península y descenderán un pelín en el sur. En el resto se mantendrán sin cambios significativos. El Valle del Guadalquivir y la mitad sur de Extremadura volverán a superar los 25ºC con holgura y el resto de capitales, salvo las situadas a primera línea del Cantábrico y Atlántico, llegarán o superarán los 20ºC.

En la jornada del viernes las temperaturas máximas descenderán de forma ligera en el interior peninsular, sobre todo en su flanco oeste. Las ciudades de Sevilla y Badajoz en las horas centrales parece que ya no llegarán a los 30ºC, aunque se quedarán cerca. Por allí las mangas cortas aún serán indispensables. Tanto o más que en el resto del país, donde el mercurio acabará marcando al menos 20ºC. A excepción de San Sebastián, Vitória, Santander o Burgos que no llegarán por poco a la veintena. El fin de semana continuará por estos mismos derroteros.

Tormentas a la vista

Esta tarde ya tendremos algunos chubascos puntuales en el Sistema Central, Ibérico y en los alrededores de Pirineos. Mañana las lluvias vespertinas irán a más, con tormentas en los principales sistemas montañosos y parte de Castilla y León. Viernes y sábado depararán fenómenos tormentosos en casi todo el interior peninsular, repartidos de forma irregular. Estos chaparrones se extenderán a otro muchos puntos prelitorales, salvo en el cuadrante sureste, donde los cúmulos difícilmente cuajarán. El domingo, en cambio, la mayor inestabilidad parece que quedará concentrada en las montañas del sur y el este de la Península, llegando también a Baleares.