Todo lo que debes saber ante las inminentes heladas

Ahora mismo el aire polar está colándose a través de los Pirineos. Su procedencia, el interior y norte de Europa, otorga a la masa de aire características continentales: es muy fría y seca. Por esto último, no está previsto que en las próximas horas la nieve vaya a ser un problema más allá de la zona pirenaica y el centro/este de la Cordillera Cantábrica. Sí que serán noticia las heladas, por su extensión y, sobre todo, por su aparición en zonas poco convencionales, como el litoral mediterráneo. Para el viernes ya hay 35 provincias con avisos de la AEMET por frío.

De entrada hay que definir qué se considera una ‘helada’. A nivel oficial se define a este fenómeno como la ocurrencia de una temperatura del aire de 0 ºC o inferior, medida a una altura entre 1,25 y 2 metros por encima del nivel del suelo, y dentro de una garita meteorológica. Nosotros nos vamos a quedar con que hace mucho frío en superficie, ¡0 ºC o menos!

Para obtener estos valores en invierno no hace falta que llegue una masa de aire polar. En los últimos días el anticiclón, con sus noches claras y sin viento, ha formulado un buen puñado de heladas. Y además moderadas. Esta madrugada el observatorio de Xinzo de Limia, en Ourense (red AEMET), ha marcado una temperatura mínima cercana a los -8 ºC. Entonces, ¿qué tienen los próximos días de particular? Que el aire polar continuará dejando noches gélidas, con heladas aún más generales, y máximas también frías. Los próximos dos o tres mediodías no serán para tomar el solecito. Más bien para cobijarse junto al radiador, batín en ristre.

Consejos ante las próximas noches heladoras

Si tienes que darte una caminata por el exterior es mejor llevar varias prendas ligeras y cálidas superpuestas. No hay que fiarse de los jerseys ‘gordotes’, están sobrevalorados si abajo no hay un par de camisetas interiores. Además, hay que evitar ropa ajustada para que el aire circule entre la piel y la ropa, actúa de aislante. Ah, y por cierto, las manoplas proporcionan más calor que los guantes. Son una gozada.

Otro de los motivos por lo que se aconseja la técnica de la cebolla –llevar muchas capas- es para poder eliminar alguna prenda si acabamos pasando calor. Sudar multiplica el frío. A primera hora de la mañana además nos vendrá genial protección para el rostro y la cabeza, ¡que no llegue el aire polar a nuestros pulmones! Y si vas a coger el coche disminuye la velocidad con hielo o nieve en la calzada.

En casa los niños deben estar alejados de braseros y estufas. También los visillos y las cortinas para evitar incendios. Ojo con las estufas de gas, hay que revisarlas de vez en cuando. Si vives en una zona con riesgo de fuertes heladas mantén el grifo ligeramente abierto en casa, para que no se rompan las tuberías por congelación. Con todo esto, y un buen café, a disfrutar del invierno.