¿Qué es la red de carreteras atmosférica?
El viento a gran escala, ¿por dónde se mueve cuando circula de las altas a las bajas presiones? Emprendemos un viaje por los vientos desde el Ecuador hasta los Polos. ¡Pónganse los cinturones! Es turbulento.
Además del desplazamiento del viento conocido -de los anticiclones a las borrascas-, hay un movimiento global que abarca a todo nuestro planeta, a modo de una "red de carreteras atmosféricas": la circulación general. Para entenderla en su totalidad hay que considerar lo que ocurre junto al suelo y, también, lo que sucede en las capas más altas de la troposfera.
Latitud de los caballos
Vamos a considerar una masa de aire cálida que asciende desde el Ecuador y se desplaza hacia los Polos. Según avanza se va enfriando y parte comienza a descender, esto sucede alrededor de los 30º de latitud norte o sur, dando lugar a una zona de altas presiones en superficie; se trata del cinturón anticiclónico subtropical, que produce normalmente cielos despejados, pocas precipitaciones y vientos casi encalmados, y que coincide con las grandes zonas desérticas del planeta. Este área también es conocida como las latitudes de los caballos, que recibe este nombre porque en los primeros viajes entre España y sus colonias centroamericanas los barcos transportaban muchos caballos y, al llegar a las zonas de altas presiones, se encontraban con días encalmados que prolongaban en exceso el viaje, por lo que los tripulantes tenía que ahorrar comida y agua, y se veían en la necesidad de matar a los caballos y lanzarlos por la borda para poder sobrevivir.
Esta primera célula, llamada tropical o de Hadley –en honor de George Hadley, aficionado a la Meteorología que en el S XVIII inicio la investigación de los vientos alisios en el Hemisferio Norte-, se cierra al emitir vientos hacia el Ecuador con dirección nordeste-suroeste en nuestro Hemisferio, los llamados vientos alisios. Estos son de gran importancia en la navegación a vela, con una intensidad media de 10 a 15 nudos y que suelen ser más intensos en verano.
Estos vientos al converger hacia el Ecuador crean un área permanente de bajas presiones, la zona de convergencia intertropical o zona de calmas ecuatoriales. Allí las precipitaciones son muy regulares y hay fuertes ascendencias verticales de aire. En esta zona se producen los contraalisios, vientos en altura que viajan hacia los Polos.
Células de latitudes medias y polar
En los anticiclones subtropicales hay una parte del aire en superficie que continua su camino hacia los Polos y forma la zona de los Oestes predominantes situada en las latitudes medias de ambos Hemisferios. Forman la célula de las latitudes medias o de Ferrel, caracterizada por las bajas presiones relativas.
La Circulación General se completa con la célula polar. En ella el aire se eleva de las zonas de bajas presiones de las latitudes medias, se va enfriando en altura y desciende sobre los Polos, dando lugar a los anticiclones polares, con aire muy frío y muy seco, y que en las capas bajas atmosféricas desciende de latitud. Así toma dirección este y se dirige, aproximadamente, hacia los 60º de latitud, dependiendo de la época del año. Allí se acumula y forma el frente polar, la línea que separa el aire frío y seco procedente de los Polos del aire más cálido y húmedo de la zona de los Oestes predominantes.
Es en esta latitud donde se forman la mayoría de las perturbaciones que afectan a nuestro país. Es una zona con un equilibrio muy inestable, porque si los anticiclones subtropicales avanzan hacia el norte pueden llegar a interrumpir los vientos del Oeste y la llegada de las borrascas, con lo cual se establecen períodos secos; o si el frente polar desciende de latitud alcanzándonos, nos encontraremos con períodos muy fríos y variabilidad de precipitaciones.
Corrientes en chorro
En la alta troposfera, en la zona de la célula subtropical y en la de la de latitudes medias, se encuentran las corrientes en chorro que actúan a modo de "grandes ríos" por donde circula el aire a gran velocidad, siendo más intensos en invierno, cuando el gradiente térmico entre los polos y el ecuador es mayor, momento en el que pueden superarse los 300 kilómetros por hora.
El descubrimiento de estas corrientes se debe al meteorólogo japonés Wasaburo Oishi. La situada en nuestras latitudes se encuentra a una altura de 5.000 metros y es utilizada a veces por los aviones comerciales en su viaje desde América hacia Europa para ahorrar combustible. La corriente subtropical, situada a unos 30º en cada hemisferio, discurre a una altitud entre 9.000 y 10.000 metros.