Una revolución para los diabéticos: la Agencia Europea de Medicamentos aprueba la primera insulina lenta semanal
La nueva insulina basal se administra por vía subcutánea, sólo una vez por semana, y ha demostrado mejorar el control glucémico, en comparación con la versión diaria, sin aumentar el riesgo de hipoglucemia.
La nueva terapia representa una verdadera revolución para todos aquellos que padecen diabetes. Se estima que en todo el mundo existen aproximadamente más de 530 millones de adultos a los que se les ha diagnosticado esta patología. Pero la cifra también podría estar muy subestimada.
La EMA, la Agencia Europea de Medicamentos, acaba de aprobar la primera insulina semanal del mundo para el tratamiento de pacientes adultos, allanando el camino para la consiguiente luz verde de los organismos reguladores nacionales.
De 365 inyecciones al año (una al día) a 52 inyecciones (una a la semana): una auténtica revolución para los pacientes con diabetes, tras 103 años del descubrimiento de la insulina.
La insulina que cambiará el estilo de vida de los diabéticos
Se trata de la molécula Icodec, producida por el gigante farmacéutico danés Novo Nordisk, que promete cambiar la vida de muchos pacientes que viven con una patología aún sutil y peligrosa, que si no se gestiona bien corre el riesgo de provocar numerosas complicaciones.
Hoy la terapia requiere que el paciente se administre insulina lenta al menos una vez al día con un impacto que va desde el manejo de la propia terapia hasta el ámbito social, laboral y psicológico de la persona y su familia.
El paciente necesita controlar y gestionar la enfermedad a diario y planificar el día en función de ello. El número de inyecciones también afecta la adherencia al tratamiento.
Los datos muestran que el 50% de quienes requieren terapia con insulina retrasan el inicio del tratamiento más de dos años, con repercusión en la patología y complicaciones.
El resultado de los estudios
En los ensayos clínicos de fase 3, informa una nota de la farmacéutica, la insulina semanal permitió una reducción de los niveles de azúcar en sangre respecto a la insulina basal diaria, favoreciendo el control glucémico en particular "en personas con diabetes tipo 2" (diabetes de tipo alimentario).
Pero esta innovación es necesaria desde hace mucho tiempo tanto para las personas con diabetes tipo 1 como para las personas con diabetes tipo 2, afirma el profesor Angelo Avogaro, jefe de la Unidad de Enfermedades Metabólicas y Diabetología del Hospital Universitario de Padua y presidente de la Sociedad Italiana de Diabetología (Sid), que afirma: "Esperamos que Aifa dé su visto bueno a la aprobación de esta insulina".
La nueva insulina basal se administra por vía subcutánea, sólo una vez por semana, y ha demostrado mejorar el control glucémico, en comparación con la versión diaria, sin aumentar el riesgo de hipoglucemia.
De hecho, señala Sid: las formulaciones semanales liberan insulina de manera más constante, lo que reduce las subidas y caídas de azúcar en sangre y el riesgo de hipoglucemia grave. Además, un mejor control glucémico a largo plazo puede reducir el riesgo de complicaciones como enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, nefropatía y retinopatía.
¿Cómo mejora la calidad de vida de un diabético con esta nueva terapia?
Menos inyecciones ofrecerían más flexibilidad para la rutina diaria, los viajes y las actividades sociales, con una disminución del estrés, la ansiedad y la depresión asociados a la diabetes, con un menor impacto emocional así como un aumento de la sensación de control y autoeficacia.
Por lo tanto, una sola inyección semanal puede aumentar la adherencia, lo que es un elemento importante para mejorar los resultados de salud y reducir tanto los ingresos hospitalarios como los costos resultantes.
El llamamiento a "garantizar rápidamente" la disponibilidad de la nueva insulina proviene también del presidente de la Asociación de Médicos Diabetes, profesor Riccardo Candido, para quien el nuevo fármaco "representa la primera gran innovación farmacológica después de más de un siglo".
Quizás después de la insulina lenta, una vez por semana, la investigación también se centre en crear una insulina rápida, aquella que los diabéticos deben tomar al menos 3 veces al día antes de las comidas, capaz de mejorar el rendimiento en el mantenimiento del valor glucémico medio a largo plazo.
Por último, el aspecto medioambiental no es irrelevante: con la terapia semanal se conseguirá un ahorro considerable en el número de bolígrafos y jeringas utilizados, en beneficio de la sostenibilidad, ya que de este modo también se reducirán las emisiones de CO2.