Poniendo el reloj en marcha: la misión de la NASA para establecer un huso horario para la Luna
La Casa Blanca ha encomendado una nueva misión a esta importante institución espacial, con la que buscan sincronizar las comunicaciones y la seguridad de las transferencias de datos en el espacio.
“Este es un pequeño paso para el hombre, pero un gran salto para la humanidad”. Desde que Niel Armstrong, primer astronauta en pisar la luna, dijo esta famosa frase, han pasado 55 años, sin embargo las curiosidades y misterios de la Luna siguen tan vigentes como en aquella época.
Un nuevo desafío lunar marca la agenda por estos días, luego de que la Casa Blanca le pidiera a la NASA crear una zona horaria para la Luna. Esto implica un gran desafío ya que el mismo reloj en la Tierra se movería de forma distinta en la Luna, lo que hace que el huso horario sea vital y complicado de desarrollar.
¿Por qué tener un horario lunar?
A medida que Estados Unidos, junto con empresas privadas, compiten por enviar astronautas a la Luna en un futuro cercano, establecer una zona horaria lunar se vuelve cada vez más relevante.
Según un documento de memorándum de Arati Prabhakar, jefa de la Oficina de Política Científica y Tecnológica de Estados Unidos (OSTP, por sus siglas en inglés), la NASA colaborará con varias ramas del gobierno estadounidense para formular un plan para el Tiempo Lunar Coordinado (LTC).
Esta referencia horaria estándar es crucial para las naves espaciales lunares y los satélites que necesitan sincronización precisa para sus misiones.
Una medida para la seguridad y precisión
El mecanismo actual de seguimiento del tiempo en la Tierra y la Estación Espacial Internacional se basa en relojes atómicos bajo el Tiempo Universal Coordinado (UTC). Sin embargo, la zona horaria espacial difiere de la terrestre debido a variaciones gravitacionales y otros factores.
El director de la OSTP, Steve Welby, aclaró en un artículo para Time que “una definición coherente del tiempo entre los operadores espaciales es fundamental para el éxito de las capacidades de conocimiento de la situación espacial, navegación y comunicaciones”.
2026, el año de nuevas exploraciones espaciales
A pesar del notable logro de la última misión tripulada a la luna hace más de 50 años, misiones posteriores han sido obstaculizadas por restricciones presupuestarias y desafíos tecnológicos. No obstante, la NASA se está preparando para enviar astronautas a la luna una vez más en septiembre de 2026 bajo el programa Artemisa.
El esfuerzo por establecer un sistema de cronometraje universal para la luna va más allá de los esfuerzos de la NASA. La Agencia Espacial Europea también está desarrollando activamente una zona horaria lunar para respaldar las futuras exploraciones lunares.
A medida que la humanidad se aventura más en el cosmos, una comprensión unificada del tiempo jugará sin duda un papel crucial en nuestra continua exploración de la última frontera.
Fuentes y referencias de la noticia:
- Gobierno de los EE. UU.: Memorandum for Departments and Agencies Participating in the White House Cislunar Technology Strategy Interagency Working Group. 2024.
- Time: Why the White House Wants the Moon to Have Its Own Time Zone. 2024.