¡Las ondas sísmicas del terremoto de Turquía cruzaron todo el planeta!
Las ondas sísmicas generadas por el fuerte terremoto de Turquía atravesaron Europa y también se han registrado en Reino Unido y España. Esto nos permite estudiar y comprender el interior del planeta Tierra. ¡Aquí te lo explicamos!
Las ondas sísmicas del gran terremoto que recientemente ha asolado Turquía y Siria, con una magnitud de 7,8, viajaron miles de kilómetros, y fueron registradas por sismógrafos ubicados en Italia, Reino Unido, España y también en Estados Unidos, hasta la lejana Alaska.
Esto no sorprende a los científicos: las ondas sísmicas generadas por los terremotos más poderosos pueden viajar por todo el planeta, no solo por la superficie, sino también a través de las profundidades. Esto nos proporciona información muy valiosa sobre el interior de la Tierra.
Las ondas sísmicas del terremoto de Turquía cruzaron Europa
A continuación podemos ver animaciones que muestran el paso de las ondas sísmicas generadas por el terremoto de magnitud 7,8 de ayer en Turquía a través de algunos sismógrafos europeos. Otra animación muestra la propagación de las ondas sísmicas en lugares tan alejados como América del Norte.
Los puntos indican las estaciones del sismógrafo, el color rojo muestra un movimiento vertical ascendente del suelo y el color azul un hundimiento del suelo. Como se puede observar, también se han detectado ondas sísmicas en países más alejados del epicentro como España o Reino Unido (incluso al otro lado del Atlántico). Debajo podemos ver la señal sísmica registrada en Gran Bretaña.
El hecho de que sismógrafos europeos y estadounidenses registraran las ondas sísmicas generadas por el seísmo de hace unas horas, cuyo epicentro se situó a miles de kilómetros, no significa que la sacudida se sintiera también en Londres o Madrid. Los sismógrafos son instrumentos muy sensibles, capaces de detectar oscilaciones muy leves en el suelo, que pasan desapercibidas para los humanos.
Cada día se producen en el planeta Tierra miles de terremotos. En España se registran decenas, que son medidos con precisión por los sismógrafos. Los humanos sienten solo un porcentaje muy pequeño de estos temblores.
¿Qué son las ondas sísmicas?
Cuando se produce un terremoto, debido a la ruptura a lo largo de una falla, se libera energía elástica, que se propaga en todas direcciones en forma de ondas sísmicas. El punto de ruptura se llama hipocentro. La enorme energía liberada por un terremoto se extiende desde el hipocentro en todas las direcciones en forma de ondas sísmicas.
Las ondas sísmicas generadas por un sismo son de dos tipos: longitudinales (ondas P, o de compresión) y transversales (S, ondas de corte), con características diferentes.
Luego están las ondas superficiales, que son las responsables de la mayor parte de los daños.
Gracias a las ondas sísmicas sabemos cómo es el interior de la Tierra
Las ondas sísmicas son muy rápidas y son capaces de atravesar el planeta si el terremoto que las generó es lo suficientemente potente. En general, los terremotos mayores de 5,0 tienen la capacidad de generar ondas sísmicas que se detectan incluso en el extremo opuesto del planeta.
En algunos casos, incluso una erupción volcánica muy fuerte puede producir ondas sísmicas que viajan por todo el mundo: esto es lo que sucedió en 2022 con la erupción de Tonga.
Las ondas sísmicas se propagan en la superficie, pero también atraviesan las profundidades del planeta
Las ondas sísmicas P y S tienen la capacidad de atravesar también el interior del planeta, viajando de un lado a otro en poco tiempo. Las ondas P son más rápidas que las ondas S y se comportan de manera diferente dependiendo de la densidad del medio por el que se propagan.
Su diferente comportamiento según las características físicas del medio atravesado, ha permitido a los geólogos entender que la Tierra está formada por envolturas concéntricas completamente distintas. Las ondas sísmicas generadas por fuertes terremotos nos han posibilitado, por tanto, desvelar la estructura interna del planeta, que de otro modo nunca habríamos podido conocer.
En definitiva, el hecho de que la velocidad y el comportamiento de las ondas sísmicas P y S a través de las profundidades del planeta esté influenciado por la densidad del medio atravesado, y por otras características físicas, ha permitido a los científicos comprender cómo es el interior del planeta.