Los astrónomos descubren por primera vez un sistema de planetas en formación
Un grupo de investigadores australianos obtuvo datos de un telescopio ubicado en Chile para observar la formación desde cero de un sistema planetario. Esta sería una de las primeras evidencias del nacimiento de planetas.
Una forma de entender mejor de cómo llegamos aquí, es contemplar el Universo que nos rodea. Al observar la formación de estrellas, galaxias o planetas, es posible encontrar indicios de cómo llegamos aquí.
El sistema solar tiene unos 4500 millones de años y es extremadamente difícil entender cómo se formó. Una manera de comprender mejor esto, es precisamente observar la formación de sistemas planetarios alrededor de las estrellas. Sin embargo, esta es una tarea complicada, y hasta la fecha sólo se han encontrado raras observaciones. Afortunadamente, un grupo de astrónomos australianos encontró evidencias de un planeta en formación.
¿Cómo se forman los planetas?
Un sistema de planetas comienza a formarse cuando una nube de materia colapsa.
En las regiones de la nube que están más alejadas de la estrella, el agua puede congelarse y comenzar a derretirse, extrayendo gas de la región. Esto se espera como una formación de planetas gigantes gaseosos. La idea es que estos gigantes gaseosos se formen primero.
Con el poco material restante, los planetas rocosos como la Tierra pueden comenzar a formarse en regiones cálidas cercanas a la estrella recién nacida. Además, los asteroides y los satélites naturales se forman a partir de pequeñas cantidades de materia.
La formación de los planetas: uno de los grandes misterios
A pesar de las observaciones que sugieren que estamos en el camino correcto para comprender la formación de planetas y estrellas, quedan algunas dudas abiertas. Además, el proceso en el que los planetas comienzan a acumular materia es extremadamente complejo, y más si añadimos la interacción con otros planetas y su propia estrella.
En el propio sistema solar, el cinturón de asteroides continúa alimentando este misterio, ya que algunos astrónomos proponen que allí se debería haber formado un planeta que, por alguna razón, fue destruido en el proceso de formación
¿Por qué es tan difícil observar los planetas?
Una de las razones es que los planetas no emiten luz propia, la luz de estos objetos está relacionada con la luz de la estrella central que es reflejada por la superficie del planeta. Exactamente como ocurre con el Sol y nosotros. Debido a esto, es un desafío poder observarlos.
La forma más común de buscar exoplanetas es a través de eventos transitorios. Los eventos transitorios ocurren cuando un exoplaneta pasa frente a la estrella y forma una especie de eclipse, atenuando el brillo de la estrella.
Además de estar cegados por la luminosidad de la estrella, los planetas suelen ser lo suficientemente fríos como para no ser muy visibles en el infrarrojo.
Imagen térmica de los planetas
Se espera que los planetas que están en proceso de formación o terminen de formarse se calienten. Debido a que tienen una temperatura alta, es posible que tengan una imagen infrarroja.
Usando un instrumento de observación infrarrojo llamado SPHERE, el grupo australiano se dirigió por el astrofísico Iain Hammond encontró evidencia infrarroja de la formación de un planeta. Después de eso, calculan que el nuevo planeta está a unos 374 años luz de nosotros y su estrella se encuentra a una distancia 37 veces mayor a la distancia de la Tierra al Sol. Dentro del sistema se encontró un planeta en formación que bautizaron con el nombre de HD 169142b.
El descubrimiento del planeta HD 169142b
A medida que el planeta se forma y acumula materia a su alrededor, deja un espacio en el material alrededor de la estrella. Además, también puede hacer que se formen brazos en espiral cuando pasa por una región.
El equipo australiano pudo registrar con precisión esta brecha y momentos después de que el planeta pasó por una región formando brazos espirales. Además, se han encontrado otros huecos, pero se necesitan más observaciones para confirmar si hay más planetas allí. Esta observación es la tercera observación de formación de planetas, pero es la primera vez que observamos la formación de un planeta en una etapa tan joven. Curioso, ¿verdad?