La "sartén" de España: estos son los lugares más calurosos del país
¿Cuáles son los lugares donde el calor extremo es más habitual en España? ¿Qué tienen de especial estas zonas? Hagamos un breve recorrido para tratar de responder a estas preguntas.
Al igual que con el triángulo del frío, hay puntos de la geografía española que se convierten en auténticos hornos copando de forma habitual los rankings de temperatura máxima. Se trata de zonas que por su latitud, orografía y condiciones de viento tienden a concentrar e intensificar el calor diurno.
La sartén del valle del Guadalquivir
El curso medio del Guadalquivir (Andalucía) es, sin duda, uno de los lugares con calor más extremo y frecuente en España. Localidades como Córdoba, Andújar, Écija y Sevilla capital ostentan habitualmente los valores de temperatura más altos en verano. En esta zona se han superado los 45 ºC en varias ocasiones y es donde descansa el récord nacional de calor.
El 14 de agosto de 2021, se batió la temperatura más alta jamás registrada en España. En La Rambla (Córdoba), el mercurio se enfiló hasta los 47.6ºC y Montoro se quedó en 47.4ºC. El récord anterior era de 47.2ºC medidos también en Montoro el 13 de julio de 2017.
Estas son temperaturas oficiales, medidas a la sombra, a 1.5 metros sobre el suelo y en garitas adecuadamente ventiladas. Los típicos termómetros de calle situados al sol y en un chasis metálico no ofrecen datos válidos ni representativos.
¿Por qué hace tanto calor allí?
La cercanía del Valle del Guadalquivir respecto del norte de África, lo convierte en una zona muy vulnerable a la entrada de aire muy cálido procedente del Sahara. La latitud es pues el primer factor a tener en cuenta. Por norma general, cuanto más al norte menos recurrente es el calor extremo.
Sin embargo, la cercanía del desierto no es un factor imprescindible. En ocasiones, la propia continentalidad peninsular puede generar masas de aire muy cálidas sin necesidad de que suban desde África. Algunas olas de calor se producen por la llegada de aire Atlántico que se recalienta al descender en el seno del anticiclón y por la fuerte insolación sobre la península.
La depresión del Guadalquivir es una zona de tierras bajas encajonada entre dos sistemas montañosos: Sierra Morena al norte y las Sierras Subbéticas al sur. El aire queda atrapado dentro del valle y se calienta muy intensamente en contacto con la superficie. Las montañas dificultan la renovación o ventilación de esta burbuja de aire caliente y bloquean la entrada de las brisas Atlánticas.
El valle del Ebro
El valle del Ebro está situado más al norte, pero puede presentar temperaturas extremas debido a su orografía. Los vientos aquí juegan un rol fundamental. Las temperaturas más elevadas se dan con el Fagüeño, un viento de oeste y suroeste con mucho recorrido terrestre. El 7 de julio del 2015 se batió récord absoluto en el aeropuerto de Zaragoza con 44.5 ºC. Por el contrario, el Cierzo es el refrigerador natural del valle del Ebro y sopla del NW a lo largo del curso del río provocando una fuerte bajada del mercurio.
Los valles del Tajo y Guadiana
Los valles del Tajo y Guadiana son otros puntos candentes de la geografía peninsular y se extienden desde Portugal hacia Castilla La Mancha y Extremadura. Sus características son similares a la depresión del Guadalquivir, aunque la altitud media es superior. Los récords de temperatura máxima dan cuenta del potencial de esta zona: 45.4 ºC en el aeropuerto de Badajoz (13-07-2017) y 44.3 ºC en la ciudad de Cáceres (31-08-19).