Increíble descubrimiento: la vegetación absorbe más CO2 del que pensábamos

El estudio se ha llevado a cabo en una ciudad que tiene la fuente urbana de carbono más grande del país en el que se encuentra, ocupa el tercer puesto a nivel mundial, y posee un núcleo urbano con más de 7 millones de cobertura vegetal. Tras estas grandes pistas difícil seguir ocultando la ciudad de los rascacielos: en efecto, hablamos de Nueva York.

Esta icónica ciudad, conocida por todos, ha sido seleccionada para el estudio debido a sus grandes emisiones de combustibles fósiles y a la enorme cantidad de vegetación que posee su núcleo urbano. Ambos factores presentan una gran oportunidad científica para cuantificar las contribuciones relativas de la biosfera en las concentraciones de CO2 en la atmósfera urbana por emisiones antropogénicas.

El efecto increíble de la vegetación

Como todos ya sabemos, la luz del sol permite a las plantas obtener energía para producir su alimento a partir del CO₂ presente en el aire y con ayuda del agua, proceso que conocemos como fotosíntesis.

Esta absorción de CO₂ por parte de la vegetación varía significativamente en escalas temporales diurnas y estacionales. En cuanto a diurnas, ya sabemos que durante el día se produce la mayor absorción, y en lo que se refiere a periodo estacional, en verano y primavera, cuando las plantas florecen, es el máximo pico de asimilación.

Todo ello y junto al clima relativamente frío de Nueva York, el estudio se llevó a cabo en la época en la cual la absorción de carbono es mayor, desde mediados de abril hasta el ecuador de octubre de 2021.

El estudio utilizó un modelo de respiración y fotosíntesis de la vegetación para cuantificar los flujos biogénicos de CO₂. En el mismo, además de añadir la cobertura boscosa, se incorporaron árboles callejeros individuales, pequeños jardines traseros, la maleza y otros vegetales pequeños que nunca se había tenido en cuenta en otros estudios.

Los vegetales absorben casi la mitad de las emisiones urbanas

Los resultados del estudio sorprendieron gratamente a los científicos: en muchos días de verano, la absorción total, a través de la fotosíntesis por parte de la vegetación, equivalía al 40% de las emisiones antropogénicas.

Los científicos observaron que los niveles de CO₂ subían por la mañana junto con el tráfico y otras actividades, y descendían un poco por la tarde, cuando la hierba y los árboles se ponían a "trabajar".

Este increíble resultado resalta la gran importancia de la vegetación urbana en el ciclo del carbono. Esto destaca la enorme contribución que hacen los ecosistemas metropolitanos al ciclo urbano del carbono, incluso en grandes megaciudades.

¿Qué datos tenemos en España?

En 2021, España emitió 234 ppm CO₂, lo que supone un casi un 10% más respecto a 2020, frente a los 4.752,079 ppm CO₂ que emitió Estados Unidos, un aumento del 6,45% frente a los datos registrados en 2020.

De todas esas emisiones con etiqueta española, el 40% del total se produce en municipios urbanos: Madrid, Barcelona y Zaragoza encabezan el ranking de ciudades españolas por su huella de carbono.

A medida que aumenta el tamaño de la población en los municipios crece el volumen de emisión. La tendencia es un aumento promedio de 140 toneladas por cada aumento de 100 habitantes.

Entonces, ¿tenemos suficientes árboles para compensar esta tendencia? La respuesta es no, rotundamente, no. En España, a grandes rasgos, nuestros árboles retienen solamente el 15% del CO₂ que emite el país.

No sólo el cambio en la dinámica energética, y por ejemplo algo tan fácil cómo plantar un árbol podría ayudarnos a mitigar el gran problema que tenemos, sobre todo, en áreas metropolitanas. Pensemos que en una calle de 100 metros de longitud y con 10 árboles, se podría absorber de media al día el CO₂ emitido por 10373 vehículos.