Fragmentos de vidrio volcánico en la Antártida desvelan la fecha de una de las erupciones más violentas en la Tierra
Un grupo de científicos neozelandeses hayan ceniza volcánica en la Antártida y determinan el año exacto de una de las explosiones más violentas de la historia.
Los estudios paleoclimáticos nos pueden contar detalles asombrosos de lo que pasó en la Tierra miles de años antes de nacer nosotros. Recientemente, gracias a un grupo de científicos neozelandeses, se ha determinado la fecha “exacta” en la que ocurrió una de las supererupciones volcánicas más devastadoras del mundo.
¿De qué zona hablamos?
La conocemos como lago Taupō, que viene del maorí, taupōmoana. Este territorio resulta ser el lago de agua dulce más grande de Oceanía, con una extensión de 616 kilómetros cuadrados. Se encuentra situado en la isla norte de Nueva Zelanda. El origen de este curioso lago es volcánico, una gran depresión similar a un caldero formado poco después del vaciado de una cámara de magma tras una erupción volcánica.
El culpable de que ahora veamos un lago, es el volcán Taupō, ubicado justo ahí. Este volcán produjo dos de las erupciones más violentas del mundo en tiempos geológicamente recientes. La primera fue Ōruanui, hace alrededor de 25.500 años y la otra fue la erupción de Hatepe, hace alrededor de 2000 años.
¿Cómo determinaron el año?
Según un reciente artículo publicado en la revista Forbes, científicos de la Universidad de Te Herenga Waka-Victoria, en Wellington, pudieron determinar con gran exactitud el alrededor de qué año ocurrió la última explosión volcánica. Según el autor de este estudio, Stephen Piva, la fecha de este evento siempre ha sido un punto de disputa.
La erupción extendió cenizas volcánicas por toda la región. De hecho, han sido las cenizas las que han ayudado a calcular la fecha. Para empezar, descubrieron siete fragmentos de vidrio volcánico geoquímicamente unidos y enterrados en el núcleo de un trozo de hielo a unos 279 metros de profundidad.
Este hallazgo pertenece a la Antártida occidental, concretamente en la Isla Roosevelt. La ceniza volcánica encontrada consiste en fragmentos de lava y roca solidificada. Bajo un microscopio, este trozo parece estar hecho de pequeños fragmentos de vidrio roto. Tras un análisis posterior, se determinó que estos fragmentos estaban vinculados a la erupción de Taupō.
Curiosidades sobre esta erupción
El penacho de la erupción habría enviado un enorme volumen de partículas volcánicas al aire y posteriormente se habrían dispersado por el viento, tanto así que llegaron a encontrarse a 5000 kilómetros del Taupō.
Concretamente, la erupción tuvo lugar en el año 232, a principios del otoño. La confirmación de la fecha nos brinda una oportunidad para estudiar los posibles efectos globales del volcán en la atmósfera y el clima. Todo este resultado científico resulta crucial para comprender y mejorar la historia, así como para entender el comportamiento eruptivo del Taupō