Este nuevo modelo meteorológico podría predecir las intensificaciones explosivas de los huracanes
Advertir al público de la llegada de un huracán es fundamental para salvaguardar a las comunidades ante el peligro. Esta no es una tarea fácil, o al menos no lo ha sido hasta ahora. ¿Esto cambiará con la llegada de un nuevo modelo?
Virginia Key se encuentra a las puertas de Florida, concretamente al sureste de Miami y dentro de lo que se conoce como "Hurricane Alley". Se trata de una zona de aguas cálidas que resultan ser perfecta para la formación de huracanes. Más de 250 huracanes han golpeado Estados Unidos desde mediados del siglo XIX, pero... ¿no se podrían predecir con mayor exactitud?
La predicción de huracanes: una tarea complicada
En Virginia Key se encuentra el Laboratorio Oceanográfico y Meteorológico de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica. Allí los científicos trabajan día y noche para poder hacer un pronóstico de estos ciclones tropicales más preciso. Sin embargo, este sigue siendo uno de los problemas más más recurrentes. El saber con exactitud cuándo se intensificará una tormenta tropical o un huracán.
Predecir el movimiento y desarrollo de un huracán no es nada fácil, ya que la velocidad máxima sostenida del viento es extremadamente difícil de prever. Ahora bien, según esta noticia publicada en la revista digital de Scientific American, el futuro de un buen pronóstico para huracanes no está tan lejos.
Aprendiendo del pasado
Según la NOAA, el nuevo modelo llamado Hurricane Analysis and Forecast System (HAFS) que tardó más de tres años en desarrollarse, podría proporcionar advertencias más tempranas de una rápida intensificación de huracán. También podría ayudarnos con predicciones de impactos como lluvias fuertes, tormentas o marejadas ciclónicas.
Aun así la meta sigue estando algo lejos. Uno de los casos que dejaron sin palabras a los expertos fue el del Huracán Charley en 2004, cuando se pronosticó que se fortalecería de categoría 2 a 3 y pasó en menos de 6 horas a generar vientos de 245 kilómetros por hora. Esta fue la tormenta más fuerte que azotó Florida desde el Huracán Andrew en 1992.
Los científicos afirman que cada vez que un ciclón tropical se intensifica cerca de tierra firme, algo que muchas veces no está bien pronosticado, la gente corre un riesgo mucho mayor porque no está preparada. Lo mejor es aprender del pasado para no repetir los mismos errores.
Factores que tiene en cuenta el nuevo modelo
Obtener información sobre las condiciones ambientales de una tormenta es muy importante, aunque no es suficiente para predecir con certeza la posible intensificación. La física interna de la tormenta también es crucial, según los investigadores de la NOAA.
Recopilar datos detallados del interior del huracán permiten que los modelos informáticos representen con mayor precisión el comportamiento de las tormentas. Así, los meteorólogos pueden mejorar sus pronósticos. En la actualidad, los modelos predicen con precisión una intensificación rápida del 32 %.
Ahora bien, equipados con HAFS, los meteorólogos esperan mejorar su registro al detectar al menos la mitad de las tormentas que se intensifican rápidamente. HAFS proporciona representaciones más detalladas de la dinámica interna de una tormenta y también puede incorporar esos datos más rápido que los modelos actuales.
Otra innovación es “anidar” este nuevo modelo dentro del modelo más grande de Global Forecast System (GFS). El HAFS escanea el océano como una lupa a una resolución más alta que los modelos de huracanes anteriores. Este nuevo “enlace” permite calcular cómo las características atmosféricas a gran escala, como los frentes fríos y las zonas de alta presión, influyen en la física interna de un huracán.
¿Cuándo comenzarán a utilizarlo?
HAFS entrará en funcionamiento oficialmente el 1 de julio de este mismo año. De esta manera los meteorólogos del Hurricane National Center pueden confiar en él como guía para hacer sus predicciones. Con esta nueva incorporación quieren proporcionar orientación de previsión sobre la trayectoria, intensidad y estructura de los ciclones tropicales al Centro Nacional de Huracanes de la NOAA.
Los científicos y meteorólogos están emocionados y expectantes, y esperan que este nuevo modelo haga un trabajo más preciso que el modelo que se está reemplazando.