¿Cuándo fue la última vez que la Antártida estuvo libre de hielo?
Escondida bajo una capa de hielo de 2 kilómetros de espesor en promedio, hay una amplia variedad de paisajes que alguna vez estuvieron libre de hielo. Pero... ¿cuándo sucedió esto?
La Antártida es el continente más frío de la Tierra, un desierto de hielo donde se registró la temperatura más baja desde que hay registros: -89,2 °C el 21 de julio de 1983, en la base rusa Vostok. El continente antártico es un 25 % más grande que Europa y un 63 % mayor a Oceanía, y podría alojar unas 27 veces a España.
Pero el continente blanco no siempre ha estado congelado. Hasta hace relativamente poco tiempo en términos geológicos, la mayor parte de la Antártida lucía como el norte de Canadá en la actualidad, una tundra y bosque de coníferas. Y determinar cuándo se formó la capa de hielo que hoy prevalece en la Antártida, es tema de investigación de muchos científicos.
¿Por qué el investigar el clima de la Antártida?
La Antártida es la región del planeta que más sufre el calentamiento global. El aumento de la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera terrestre como el CO2 está generando el aumento de la temperatura media global, y la Antártida es la zona que tiene más impactos negativos por ello. Pero lo que pasa en la Antártida no quedará en la Antártida.
La región antártica (al igual que el Ártico) se calienta a un ritmo 3 veces más rápido que el resto del planeta. Ese aumento de temperatura media, que es de aproximadamente 3 ºC desde la era industrial, implica que todas las plataformas de hielo, extensiones flotantes de agua congelada y que se encuentran conectadas con el continente, dejen de ser estables y, como consecuencia del aumento de las temperaturas, la variación estacional de su superficie sea muy significativa. Y esto hace que se debilite y retroceda, perdiendo 25000 km2 de plataforma de hielo en 50 años.
Pero lo más importante está sucediendo con los glaciares y hielos antárticos. La capa de hielo de la Antártida tiene un grosor máximo de 4.8 km y almacena el 90% del agua dulce del mundo. De derretirse por completo, podría hacer elevar el nivel medio del mar en unos 60 metros, con consecuencias catastróficas.
¿Cuándo se formó el hielo antártico?
Las temperaturas globales son un factor clave que influye en el grado de cobertura del hielo. Hace 50 millones de años, el mundo era unos 14 grados Celsius más cálido de lo que es en el presente, y la concentración de dióxido de carbono en nuestra atmósfera terrestre era muy elevada comparada con los valores actuales de 400 partes por millón (ppm): era de entre 1.000 y 2.000 ppm, entre 2,5 y 5 veces los niveles actuales.
Posteriormente el planeta comenzó a enfriarse lentamente durante unos 16 millones de años. Hace 34 millones de años, la temperatura media del planeta había disminuido unos 6 ºC, hasta establecerse en alrededor de 23 ºC, casi 8 ºC más cálido de lo que es hoy.
Este descenso de temperatura se puede deber a dos factores en combinación, según Eric Wolff, paleoclimatólogo de la Universidad de Cambridge: uno de ellos es un cambio en la concentración de dióxido de carbono de la atmósfera, favoreciendo un enfriamiento del clima global; y el otro son los movimientos de los continentes y, en particular, la apertura del Pasaje de Drake, el estrecho entre América del Sur y la Antártida que conecta el Atlántico Sur con el Pacífico Sur.
Hubo una era geológica donde América del Sur y la Antártida estaban unidos. Al separarse permitió que se formara una corriente agua que rodeara la Antártida en círculo (corriente circumpolar), aislando a la Antártida del resto del mundo y haciendo más difícil que las masas de aire cálido crucen el Océano Austral. En consecuencia, esto hizo que la Antártida sea más fría.
El continente aislado
El mismo proceso de tectónica de placas que separó a la Antártida del continente, también influyó en los niveles de dióxido de carbono. La erosión de las rocas y la actividad volcánica son parte del ciclo natural del carbono, y actuando durante miles de años, cambió el equilibrio de los gases en la atmósfera.
Con un grado de confianza muy aceptable gracias a las firmas químicas en los sedimentos rocosos, los científicos señalan que esta transición ocurrió hace 34 millones de años. Y la expansión de los glaciares en la península antártica fue un proceso largo y gradual influenciado por los cambios atmosféricos, oceanográficos y tectónicos.
La Antártida ya estuvo libre de hielo alguna vez. Y definitivamente es posible que pueda volver a estar libre de hielo. Si bien las chances de que la actividad humana conduzca al derretimiento completo de la capa de hielo, son pocas, es importante que la humanidad haga todo lo posible para limitar la actual pérdida de hielo de la Antártida.
La mejor manera de predecir los cambios futuros en el comportamiento de las capas de hielo antártico y como esto afectará a todo el planeta, es entender su pasado.