Climatología de la lluvia de abril: no es tan lluvioso como piensas
El mes de abril lo relacionamos con la lluvia (En abril, aguas mil), sin embargo, casi en ningún lugar de España es el mes más lluvioso o uno de los más lluviosos del año. Su carácter cambiante hace que se produzcan muchos días chubascos, aunque no se acumulen grandes cantidades.
Si hay un fenómeno meteorológico que asociamos al mes de abril ese es, sin duda, el de la lluvia. Dicha relación puede llevarnos a pensar que dicho mes es uno de los más lluviosos del año; sin embargo, como veremos a continuación, apenas hay lugares de la geografía española donde se da dicha circunstancia.
Lo que es indudable es que abundan los refranes que hacen referencia a las lluvias de abril, comenzando por el más conocido de todos ellos: “En abril, aguas mil”. Antonio Machado en “Campos de Castilla” (año 1912) dejó escrita una de las mejores descripciones de abril en clave poética: Son de abril las aguas mil. / Sopla el viento achubascado, / y entre nublado y nublado / hay trozos de cielo añil. / Agua y sol. El iris brilla. / En una nube lejana, / zigzaguea / una centella amarilla.
El que en abril haya muchos días de lluvia no significa que sea un mes lluvioso, entendiendo por esto último que se acumulen a lo largo del mes de abril grandes cantidades de lluvia. De nuevo el refranero nos arroja pistas sobre el comportamiento del tiempo del cuarto mes del año, al afirmar que “Las aguas de abril todas caben en un barril”.
Este conocido refrán, tal y como ocurre con otros muchos, tiene una versión extendida, que aporta más información de interés: “Las aguas de abril todas caben en un barril, pero si el barril está desfondado, todo el campo está anegado”. Los fuertes aguaceros, asociados a las tormentas, no suelen faltar a su cita en distintos momentos a lo largo del mes de abril, lo que muchos años echa al traste con la celebración de algunas procesiones de Semana Santa.
El meteorólogo Ángel Rivera en su muy recomendable libro “Meses y Tiempos” (Punto Rojo, 2014) dedica un capítulo al cuarto mes del año, que titula “Abril o la incertidumbre”, donde describe de forma sintética y certera las principales características de abril. En palabras suyas es “pura primavera, si por primavera se entiende la rápida alternancia de ratos de ambiente delicioso con temperaturas muy agradables con otros donde la tormenta inunda todo con chubascos fuertes, granizo a veces y un molesto frío húmedo.” Apunta también Rivera la dificultad que tiene definir qué es un abril “normal” desde un punto de vista climatológico, por su carácter cambiante.
Apuntes climatológicos de las lluvias abrileñas
Acompañan estas líneas un par de mapas elaborados por César Rodríguez Ballesteros, que trabaja en el Servicio de Banco Nacional de Datos Climatológicos de AEMET, y en su conocido blog comparte abundante información gráfica climatológica elaborada a partir de los datos en abierto de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET Open Data).
El primer mapa es muy revelador, ya que con ayuda de una escala de doce colores podemos identificar cuál es el mes más lluvioso del año en cualquier lugar del territorio español. El mes de abril tiene asignado el color púrpura (morado oscuro) y podemos comprobar que solo aparece señalada con ese color un área que cubre parte del sur y centro de Navarra y zonas limítrofes de La Rioja y la provincia de Zaragoza, así como algunas otras zonas satélite de pequeña extensión.
En el mapa vemos también un claro dominio de los colores rosa claro (diciembre), rosa oscuro (noviembre), rojo (octubre) y violeta (mayo). En gran parte de la vertiente atlántica peninsular diciembre es el mes más lluvioso del año. En el área mediterránea son las lluvias de octubre las dominantes, mientras que en las comunidades cantábricas es el mes de noviembre el que más llueve. Volviendo al mes de abril, en Madrid y Bilbao es el quinto mes más lluvioso del año, en Valencia el sexto y en Santiago de Compostela el séptimo. Estos datos de ciudades se han obtenido tomando como periodo de referencia el 1981-2010.
Tal y como certifica el mapa anexo, con la precipitación media del mes de abril (en este caso para el periodo normal 1991-2020), la zona de España donde más cantidad de lluvia se acumula en el mes de abril es el oeste de Galicia; en particular las Rías Bajas, con cantidades que superan ligeramente los 150 litros por metro cuadrado. Destacan, por detrás, las comunidades cantábricas, con valores entre los 75 y los 100 l/m2, superándose ligeramente esta última cantidad en el oeste de Guipúzcoa y noroeste de Navarra. En el extremo contrario tenemos, en la Península, la zona del Cabo de Gata, donde caen en promedio en abril entre 10 y 20 l/m2, y, en Canarias, gran parte de Lanzarote y Fuerteventura (islas orientales), donde las lluvias en abril son prácticamente anecdóticas; algo extensible también a otros meses del año.