Burbujas de agua comestibles, ¡adiós a las botellas de plástico!
La idea de beber agua en botellas de plástico se vuelve anticuada, y es que se puede “comer agua” con las burbujas “Ooho!”. No solo tienen beneficios para el medio ambiente, son prácticas y las puedes fabricar en tu casa. Aquí te contamos más.
Beber agua de la manera convencional con botellas de plástico, o pesados envases recargables que resultan incómodos de transportar podría ser dentro de poco un recuerdo.
Sabemos que el plástico llegó para revolucionar la vida cotidiana de los seres humanos, y nos brinda aún grandes beneficios y comodidades, pero es necesario recordar que su elaboración consume recursos no renovables, se recicla solo un muy pequeño porcentaje, y lo peor: nuestros océanos se han llenado de estos residuos (microplásticos) que afectan gravemente a la salud de todos los seres vivos.
Este innovador sistema para beber agua dentro de burbujas comestibles biodegradables promete reducir el uso de botellas plásticas. Además de ser súper práctico, este método que ya se viene implementando en varios países desde hace algunos años, por ejemplo en actividades deportivas y en eventos o festivales multitudinarios, este recurso es muy aceptado porque causa un impacto nulo en el medio ambiente.
"Ooho!", el agua comestible del futuro
Las novedosas burbujas o perlas “Ooho!” son una especie de pequeñas bolsitas comestibles llenas de agua (o también puede contener zumos, por ejemplo). Es un sistema muy práctico que no genera residuos a la hora de beber agua. Ingenieros del Royal College of Art de Londres presentaron hace algunos años el método innovador para beber agua con una cápsula biodegradable a modo de "burbuja" contenedora, que puede ser perfectamente procesada por el sistema digestivo.
Sus creadores explican que el volumen ideal de la burbuja es de 50 mililitros, y si no se consume en cuestión de pocas semanas se habrá descompuesto naturalmente. Esta es una diferencia enorme y positiva, ya que una botella de plástico tarda hasta 500 años en desintegrarse.
Este envase comestible consiste en una doble membrana para contener agua hecha a base de dos ingredientes: alginato de sodio y cloruro de calcio. Ambos compuestos combinados generan una pared de gel transparente, pero lo suficientemente sólido como para conservar líquido en el interior dando como resultado un embalaje sostenible.
El alginato de sodio es una sal soluble de sodio que se obtiene a partir de las algas marinas conocidas como alginas. Este polisacárido procedente de algas marrones es usado en la cocina como gelificante. La FAO/OMS certifica que el alginato en aplicaciones alimentarias es uno de los aditivos alimentarios más seguros, lo solemos encontrar por ejemplo en helados, gelatinas, bebidas lácteas ácidas, etc.
El segundo ingrediente, el cloruro de calcio (CaCl2), un compuesto químico inorgánico que se utiliza en una amplia gama de productos alimenticios incluyendo el queso, el tofu y bebidas energéticas debido a su eficacia como agente anti aglomerante, estabilizador y espesante.
Este increíble proyecto futurista se está llevando a cabo en los laboratorios de Skipping Rocks Lab, Londres. Los científicos siguen experimentando el método para aplicarlo a múltiples usos, incluso lo prueban como contenedor de salsas para comidas take away y en cócteles. La mejor parte es que estas membranas... ¡las puedes fabricar en tu casa!
Eco-receta para hacer tus propias burbujas de agua comestibles
La receta fue brindada por profesionales en cocina molecular, que se especializan en combinar ciencia y alimentación. Se basa en una técnica culinaria conocida como "esferificación", que consiste en formar un líquido en esferas que se asemejan visual y textualmente al caviar, fue patentado por el ingeniero de Unilever William Peschardt en la década de 1940.
La siguiente receta nos dice cómo hacer esferas capaces de contener líquido.
Aquí os explicamos el proceso, que se inicia realizando la “mezcla 1”:
- Colocar 1 gramo de alginato de sodio en una taza de agua potable (que es la que se va a esferizar y luego vamos a beber).
- Batir enérgicamente hasta que resulte una mezcla homogénea y dejar reposar por 15 minutos.
- En otro recipiente, preparar la "mezcla 2": colocar 4 tazas de agua y 5 gramos de lactato de calcio, mezclar bien.
Ahora el paso más importante, casi mágico, agregar con cuidado una cucharada de la mezcla 1 dentro del recipiente que contiene la mezcla 2. De cada cucharada resultará una burbuja de agua.
En este paso, como se muestra en el video de referencia anterior, comenzarán a formarse esferas al entrar en contacto con el lactato de calcio. Batir con mucho cuidado durante 3 minutos y verás como la membrana se forma. El último paso es estabilizar la reacción retirando cuidadosamente las esferas del recipiente con una cuchara colocándolas en un recipiente con agua ¡y listo!