Se acerca el final de la erupción volcánica en La Palma, ¡última hora!
Tras 89 días y a punto de cumplirse, por tanto, 3 meses desde el inicio de la erupción volcánica, el volcán de La Palma muestra por fin signos de agotamiento.
La erupción volcánica de La Palma iniciada el pasado 19 de septiembre a las 14:10 horas (hora canaria) cumple hoy los 89 días activos. Estos datos le confieren oficialmente la medalla de oro en cuanto a erupciones volcánicas se refiere. Este volcán es oficialmente el más longevo y devastador que ha azotado a las isla palmera, superando, por cinco días, al hasta hora más largo de la historia de La Palma, la erupción del Tehuya de 1585.
Según los últimos datos, y a pesar de su repunte de actividad el pasado fin de semana, la erupción muestra signos de debilitamiento. Respecto a lo que sucedió hace unos días, los científicos apoyan la hipótesis de que el volcán dio su último suspiro, una frase a la que ellos llaman “despedida y cierre”. En ella, el volcán sacó a la superficie lo último que le quedada. Este teoría se sostiene debido a que, hace más de doce días, no se observa sismicidad que provoque la posible realimentación del sistema volcánico.
Tras esta última fase eruptiva, el volcán se ha silenciado, casi de un día para otro. La no actividad en estos momentos del volcán, con unas variables observables que están en unos niveles muy bajos, apunta al inicio del fin de la erupción. Sin embargo, los expertos aún consideran que habrá que esperar para poder dar la noticia oficialmente.
Últimos datos
En estos últimos días, la emisión de dióxido de azufre casi ha desaparecido, si se compara con los valores de días anteriores. También lo ha hecho el tremor, un tipo de terremoto característico de los volcanes causado por el movimiento del magma que, desde la última hora de la tarde del martes, indicaba actividad inexistente en el subsuelo.
Durante la jornada de ayer, y en el último informe actualizado por el Departamento de Seguridad Nacional, los signos de agotamiento del proceso eruptivo se mantuvieron constantes, y aunque no se puede descartar un nuevo repunte de la actividad, si los datos registrados y observables se mantienen en estos niveles durante los próximos 10 días, se podría dar por finalizada la erupción.
Estos diez días es una forma de ser precavidos, según cuentan los expertos, para dejar margen suficiente al proceso de solidificación del magma en la parte más somera del cono volcánico, síntoma que excluiría por completo una posible reactivación del volcán.
Esperemos que en estos diez días los parámetros volcánicos no cambien, y que el día de Navidad nos regale a todos, y en especial a los 80.000 habitantes de la isla bonita, la gran noticia del fin del proceso eruptivo.