¿Pueden hacer 40 ºC a las 4 de la madrugada? Con el viento "Chergui" sí

La larga y abrasadora ola de calor que ha golpeado Marruecos en las últimas semanas ha dejado temperaturas extraordinarias, también a altas horas de la madrugada, cuando se alcanzaron los 40,4 ºC en la provincia de Taurant al sur del país.

Taroundant
La ola de calor ha propiciado temperaturas excepcionales a altas horas de la noche, más de 40 ºC en Taroundant al sur de Marrakech.

La ola de calor que ha azotado a España en el último mes también afectó duramente a Marruecos donde, al igual que en nuestro país, se alcanzaron temperaturas nunca antes vistas. Sin duda, un evento que marcará la historia meteorológica del mundo entero.

La semana pasada los termómetros alcanzaron los 46,2 °C en Ben Guerir (436 m snm), 45,6 °C en Kasba Tadla (503 m), 44,2 °C en Meknes (576 m), 43,8 °C en Fez (579 m) y 45,5 °C en Beni Mellal (468 m), donde han estado más de 19 días con temperaturas por encima de los cuarenta grados.

Marruecos lleva semanas lidiando con temperaturas extremas, día y noche. Hasta 40 ºC en plena madrugada.

Estas temperaturas no sólo son insoportables durante el día, sino también por la noche. Justamente el 21 de Julio, la masa de aire cálido asentada sobre el país junto con una configuración de vientos determinada dio lugar a que se registrasen los 40,4 ºC a las cuatro de la madrugada al sur de Marruecos.

Chergui, los terribles vientos del este

La configuración de vientos que se instaló el pasado 21 de julio es bien conocida en Marruecos durante los meses de verano. El Chergui, también denominado Sharqui, se trata de vientos secos, calurosos y polvorientos de componente este-sureste que soplan en el norte del país y son capaces de paralizar la vida por semanas.

Durante el episodio de registraron ráfagas de viento entre los 60 y 80 km/h.

Al este de las montañas del Atlas, el viento sopla con fuerza convirtiendo el Sahara en un mar agitado de polvo, las ráfagas de viento son tan vigorosas que la arena se eleva y supera los más de 4000 metros de altitud a través de Marruecos, donde las altas concentraciones de polvo en suspensión hace que la vida sea sumamente incómoda.

Situación sinóptica

Estos vientos se desarrollan a partir de una alta presión sobre el Mediterráneo con la isobaras casi paralelas a las costa. Los vientos húmedos y cálidos resultantes golpean la barrera montañosa del Atlas, que se extienden de noroeste a suroeste, y son forzados a ascender para salvar ese obstáculo.

Durante la elevación, la masa de aire pierde humedad y puede llegar a precipitar si el contenido de agua es suficiente. Una vez ha perdido el vapor de agua y superado los más de 4000 metros de altitud, la masa de aire desciende rápidamente por la ladera calentándose a media que aumenta la presión al descender.

Este proceso se denomina efecto foehn, fenómeno que provoca que las temperaturas sobre el oeste de Marruecos, a sotavento del Atlas, aumenten entre diez o más grados centígrados respecto a barlovento de la cordillera.

En consecuencia y bebido a la unión concatenada de estos eventos meteorológicos, durante la madrugada del pasado jueves, las temperaturas al sur de Marruecos alcanzaron los 40,4 ºC. Se ha de tener en cuenta que las mínimas registradas durante los días anteriores y normalmente de madrugada, rondaron entre los 25 y 30 ºC. Casi 10 grados más de lo normal para este episodio de temperaturas extremas.