Unos geólogos han descubierto enormes bosques frondosos en dolinas gigantes de China
Estas impresionantes formaciones kársticas situadas en el sur de China están declaradas Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO en 2007, y en una de ellas se ha encontrado un sorprendente bosque en su fondo.
Hoy viajamos a la Región Autónoma de Guangxi Zhuang, una pequeña provincia del sur de China que se caracteriza por su modelado kárstico, que recordemos que se produce cuando el agua disuelve y erosiona las rocas carbonatadas como las calizas y las dolomías, generando sumideros, dolinas y profundas cuevas.
Estos pozos celestiales son muy habituales en esta zona de China
En esta zona se encuentran decenas de simas y cuevas que son conocidas por los habitantes locales como “tiankeng”, que significa “pozo celestial”, y lo cierto es que los hay de todo tipo de tamaños y profundidades. En realidad, se calcula que en China hay alrededor de 200 tiankeng, repartidos principalmente en la provincia central de Shaanxi y por el suroeste del país.
En algunas ocasiones, el techo de estos tiankengs colapsa, formando sumideros gigantes con diámetros y profundidades que pueden superar los 500 metros. El último hallazgo ha sido obra de un grupo de científicos del Instituto de Geología Karst del Servicio Geológico de China, descubriendo que dentro de un sumidero de 192 metros, había un bosque enorme y frondoso.
No es el único, pues la mayoría de ellos albergan estos bosques que han evolucionado aislados del mundo exterior, creando un microclima único: fresco, húmedo y protegido de los vientos y temperaturas extremas del exterior. Este entorno tan especial ha permitido que especies vegetales y animales antiguas sobrevivan y prosperen.
Xiaozhai Tiankeng, el pozo más grande y profundo del mundo
Está gigantesca dolina está en Fengjie, y con sus 626 metros de largo, 537 metros de ancho y más de 600 metros de profundidad es la más grande y profunda del mundo. Se ha formado sobre una cueva y acoge un río subterráneo de más de 8 kilómetros.
Dentro de este enorme bosque se estima que existen unas 1300 especies botánicas y multitud de animales salvajes que suelen ser difíciles de ver. De hecho se ha avistado algún ejemplar de pantera nebulosa, un felino de un pelaje característico que puede llegar a medir más de un metro.
Como aseguran los científicos, la existencia de estos bosques interiores es muy común en esta región del país asiático gracias a las condiciones climáticas de la zona. Durante miles de años, el agua de lluvia ha ido filtrándose a través del suelo hasta llegar al lecho de roca, erosionando la roxa caliza.
Enormes laboratorios naturales
La ventaja de este tipo de bosques es que el hecho de que estén tan aislados permite que la biodiversidad florezca sin ningún tipo de acción humana, lo que convierte a estos tiankengs en auténticos laboratorios naturales para el estudio de la evolución y la adaptación.
Pese a que se ha empezado a investigar sobre ellos hace relativamente poco, este tipo de sumideros están despertando cada vez más el interés de los turistas, y se están adaptando para hacerlos accesibles. Si eres uno de ellos, te recomendamos que previamente te pongas en forma, pues para poder acceder a algunos hay que utilizar escaleras en zig-zag que en algunos casos cuentan con más de 2000 peldaños.