Una española visita la ciudad subterránea más grande del mundo: “20 plantas bajo tierra con pisos, escuelas y templos”
Una viajera española ofrece una mirada fascinante al interior de la ciudad subterránea más grande del mundo, revelando los secretos de esta antigua metrópolis excavada en la roca.
La creadora de contenido española Alba Jiménez, conocida por sus publicaciones llenas de aventuras en TikTok, ha cautivado a su audiencia con un impresionante vídeo que documenta su visita a uno de los lugares más fascinantes del mundo: la ciudad subterránea más grande jamás encontrada, situada en Turquía. Sus más de 150.000 seguidores han quedado maravillados con esta experiencia que mezcla historia, arquitectura y un toque de misterio.
Con su estilo espontáneo y dinámico, Alba ofrece una mirada única al interior de esta joya histórica. La ciudad, conocida como Derinkuyu, está ubicada en la región turca de Capadocia y se extiende bajo tierra a una profundidad que desafía la imaginación.
El vídeo se ha vuelto viral, alcanzando miles de reproducciones y generando un torrente de comentarios que reflejan la curiosidad y el asombro de sus espectadores.
La entrada a Derinkuyu: una puerta al pasado
Alba inicia su recorrido mostrando la entrada de Derinkuyu, una ciudad completamente excavada bajo la superficie terrestre. Este enclave histórico, que abarca aproximadamente 8 kilómetros cuadrados y desciende hasta 85 metros de profundidad, representa un testimonio de lo avanzada que estaba la ingeniería de algunas civilizaciones antiguas. Según explica Alba, este espacio fue diseñado para albergar a miles de personas, funcionando como un refugio seguro durante momentos de peligro.
Lo sorprendente de esta construcción es su complejidad. Con más de 20 niveles, esta metrópolis subterránea incluye viviendas, templos, almacenes e incluso espacios educativos. Alba destaca cómo estas áreas están interconectadas por un laberinto de pasillos y escaleras, lo que la convierte en un lugar impresionante tanto por su tamaño como por su utilidad.
Derinkuyu, un hallazgo casual que cambió la historia
Uno de los datos más curiosos que Alba comparte en su vídeo es la historia del descubrimiento de Derinkuyu. Este lugar fue encontrado por casualidad cuando un habitante local realizaba renovaciones en su casa y, al derribar una pared, encontró la entrada a esta ciudad. La anecdótica situación ha capturado la imaginación de muchos, ya que ilustra cómo los secretos mejor guardados pueden revelarse de forma inesperada.
El redescubrimiento de Derinkuyu marcó un antes y un después en el conocimiento de las ciudades subterráneas de Capadocia, una zona conocida por sus peculiares formaciones geológicas y estructuras históricas.
Diseño y funcionalidad de una la ciudad milenaria de Derinkuyu
A pesar de tener más de 3.500 años de antigüedad, Derinkuyu sigue siendo un ejemplo de diseño arquitectónico realmente innovador. Alba subraya la presencia de sistemas de ventilación altamente eficaces que permitían la circulación de aire en todos los niveles de la ciudad. Este detalle evidencia la sofisticación de las técnicas constructivas utilizadas por sus creadores.
Cada espacio dentro de la ciudad parece haber sido planeado con un propósito específico. Las áreas residenciales, los establos para animales y las bodegas para almacenar alimentos reflejan una organización que permitía a los habitantes llevar una vida relativamente normal bajo tierra. Alba también destaca en su vídeo cómo los detalles arquitectónicos sugieren que esta ciudad fue concebida para estancias prolongadas, lo que la hace aún más fascinante.
Originalmente, estas ciudades subterráneas fueron creadas para proporcionar refugio durante invasiones y conflictos. Alba menciona que los primeros cristianos ampliaron y usaron Derinkuyu para esconderse de la persecución romana. Además, la ciudad sirvió como santuario durante la incursión mongola en el siglo XIII y más tarde, durante los inicios del Imperio Otomano.
Estos refugios también estaban diseñados para defenderse de posibles atacantes. Las entradas podían cerrarse con grandes ruedas de piedra, lo que dificultaba el acceso de los enemigos. Este detalle, que la tiktoker resalta en su vídeo, pone de manifiesto la capacidad de los antiguos ingenieros para equilibrar seguridad y funcionalidad.
Una mirada al pasado desde el presente
La visita de Alba Jiménez a Derinkuyu ha puesto de nuevo en el foco esta maravillosa rareza arqueológica, recordándonos la capacidad del ser humano para crear estructuras impresionantes incluso en las condiciones más adversas. Con cada exploración, se desvelan nuevas capas de historia, invitando a todos a descubrir los secretos de esta ciudad subterránea.
El vídeo de Alba ha generado una avalancha de comentarios en TikTok, donde los usuarios comparten su asombro y experiencias personales. Algunos mencionan haber sentido claustrofobia al recorrer la ciudad, mientras que otros destacan la genialidad de su diseño. Estas interacciones no sólo amplían el alcance de su contenido, también contribuyen a divulgar la riqueza cultural de este peculiar sitio de Capadocia.