Locura meteorológica para comenzar noviembre
El nuevo mes empieza con contrastes muy fuertes a nivel meteorológico: tiempo veraniego en el sureste peninsular y en Canarias, lluvias de hasta 300 litros por metro cuadrado, un medicane en el Mediterráneo, una irrupción de aire frío en ciernes...
La transición entre octubre y noviembre nos ha dejado un panorama movido en nuestro país y de contrastes muy significativos. El río atmosférico ha regado, y mucho, la mitad oeste peninsular, con registros que han alcanzado casi los 300 litros por metro cuadrado en Grazalema (Cádiz) o han cercado los 200 litros en puntos del sistema Central.
Esta configuración atlántica con flujo de poniente en altura es el factor que explica un ambiente prácticamente veraniego en la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia, con máximas que ayer alcanzaron los 30 ºC. Hoy se han vuelto a alcanzar estos valores anómalos en la localidad murciana de Águilas con 32,5 ºC o en la ciudad de Alicante con 30,2 ºC.
En Canarias la situación es muy parecida en cuanto a la sensación térmica de verano y playa, pero distinta en relación a la configuración atmosférica que la provoca. Allí están afectados por el anticiclón de las Azores, que se sitúa encima suyo alargándose entre el archipiélago y el Sahara Occidental.
De Apollo a Wanda
Todo ello está sucediendo pocos días después del medicane Apollo que sacudió Sicilia y Calabria, en Italia, con registros de precipitación superiores a los 240 litros e inundaciones en la región de Siracusa. Además, los vientos superaron los 120 km/h y las olas alcanzaron los 5 metros de altura.
Este sistema de bajas presiones tuvo particularidades tropicales, poco menos que la tormenta subtropical Wanda, formada recientemente al oeste de las Azores. Wanda es la vigésimo primera tormenta nombrada en el Atlántico en 2021, representando a uno de los años más activos de la historia, solo por detrás de 2005 (28) y 2020 (30).
Congelador ártico en Groenlandia
Mientras que en gran parte de Europa vive temperaturas relativamente suaves debido al flujo del suroeste, en Groenlandia tienen una masa de aire ártico que deja temperaturas diurnas entre los -30 y los -35 ºC en el interior del país. Ese aire frío también afecta Islandia, aunque en menor media. La máxima prevista para Reykjavík, su capital, es de tan solo 2ºC.
¡Pero ojo! Este almacén de aire congelado tiene ganas de bajar de latitud y afectar nuestro país a mediados y finales de semana, con un cambio repentino de situación y un invierno que sacará las uñas.
¡El "invierno" llegará de golpe! Viene una masa de aire muy fría!
Esa descarga de aire frío desde latitudes altas probablemente responde a un previo calentamiento súbito estratosférico, que permite la evacuación de esas masas de aire fuera de los polos y la ondulación de la corriente en chorro.
Si tenemos en cuenta que el 70% de las configuraciones atmosféricas derivadas de un vórtice polar estratosférico débil provocan una NAO negativa, es muy probable que este mes de noviembre venga 'movidito', con frío y más precipitaciones de lo habitual.