Los vídeos y datos más impactantes del temporal mediterráneo
Las condiciones meteorológicas empiezan a mejorar en el litoral Mediterráneo tras un nuevo episodio de inundaciones, riadas y fuerte temporal marítimo que ha arrasado playas enteras estos últimos días.
El sistema de bajas presiones que ha ocasionado esta complicada situación, empieza a alejarse de las costas del este peninsular a la par que se debilita poco a poco. No hablamos en este caso de una DANA, sino de una borrasca. Aunque sus efectos pueden guardar un cierto parecido, destacando las precipitaciones que han vuelto a alcanzar intensidades muy significativas, esta depresión tenía reflejo en superficie y, por tanto, no se correspondía sólo con una depresión aislada en niveles altos.
Las precipitaciones, fuertes en amplias zonas o incluso torrenciales localmente, han sido sin duda uno de los efectos más importantes de este temporal. Las más intensas se dieron inicialmente hacia el sureste peninsular, desplazándose poco a poco hacia el norte de la Comunidad Valenciana y Cataluña, donde hoy siguen activados avisos por lluvias intensas. Las precipitaciones más abundantes se dieron al comienzo del episodio, destacando los 238 litros por metro cuadrado recogidos en la estación de Alzira/La Casella, de la red AVAMET. Cantidades también superiores a los 150 l/m2 se recogieron en importantes núcleos de población, como Gandía, donde se registraron numerosas incidencias.
Además, muchas de las zonas afectadas ya sufrieron las consecuencias de los temporales de septiembre y octubre, por lo que el temor se extendió por las zonas más inundables. Si bien es cierto que en este caso la intensidad de las precipitaciones, a pesar de llegar a ser torrencial en algunos puntos, no ha alcanzado los valores registrados durante el episodio vivido en octubre y que en ese caso sí fue provocado por una DANA.
A las inundaciones se añade el fuerte temporal marítimo
Este temporal ha sido generado por una borrasca, un tipo de depresión más habitual en estas fechas que a diferencia de una DANA tiene reflejo en superficie. Esto significa que existían gradientes de presión en niveles bajos y por tanto fuertes vientos asociados que a lo largo de estos días han afectado a toda la fachada Mediterránea, superando los 90 km/h en zonas expuestas de las baleares y con valores entre 70 y 90 km/h en amplias zonas de Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y también al oeste y sur de Almería. Cuando este viento sopla sobre extensas superficies de agua genera oleaje de gran tamaño. Tan sólo hace falta un recorrido de 200 km sobre el agua para que un viento con fuerza de temporal (superior a 63 km/h) genere olas de más de 4 metros de altura.
En este caso se han dado condiciones de mar muy gruesa en mar abierto, que es el nombre que recibe el estado de la mar cuando la altura significativa del oleaje se sitúa entre los 4 y los 6 metros de altura, incluso en la costa se han registrado olas de más de 4 metros de altura que han provocado algunos daños e inundado playas enteras. Las olas más grandes se detectaron ayer en la boya de Cabo Begur, frente a la costa de Girona, con una altura significativa de casi 6 metros y una altura máxima de 9,14 metros.
Actualmente el temporal tiende a remitir, las precipitaciones siguen produciéndose aunque con menor intensidad y la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) mantiene avisos amarillos por precipitaciones y fenómenos costeros. El viento hoy ya ha ido amainando y la situación marítima irá recuperando la normalidad. En cualquier caso, mañana todavía existirá mar de fondo de hasta 3 metros y rachas de viento puntualmente fuertes en las costas de Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía oriental.