Sequía en España: cortes y restricciones de agua en estas comunidades
La falta de precipitaciones sigue siendo el mayor de los problemas en España. El episodio de sequía está motivando a varias comunidades a limitar el consumo de agua pero, ¿qué lugares son los más afectados?
La falta de precipitaciones este año sigue siendo uno de los mayores problemas en nuestro país. Por el momento, la situación parece que continuará siendo así, al menos a corto plazo. El episodio de sequía deja a España en jaque en su segundo año consecutivo y está motivando a que diferentes regiones limiten el consumo de agua.
Esto pasa a nivel general
En España existen 26 cuencas repartidas en el territorio. Las confederaciones hidrográficas y las comunidades autónomas son las que gestionan cada cuenca. Sin embargo, esto tiene algún matiz. Será la comunidad autónoma quien gestione la cuenca si esta empieza y termina dentro de un mismo territorio.
Si no es el caso, las restricciones dependerán de las condiciones de la cuenca hidrográfica. Para hacernos una idea será algo así: Elche y Alicante aunque estén en la misma provincia no tendrán las mismas restricciones, ya que se encuentran en cuencas hidrográficas diferentes. Elche, por ejemplo, pertenece a la Cuenca del Júcar y Alicante a la Cuenca del Segura.
¿Qué lugares son los más afectados?
Las restricciones comenzaron hace un par de meses, algo antes del comienzo del verano y cuando la sequía ya estaba dejando mella. Los ayuntamientos fueron los encargados de activar los planes de sequía. La prohibición del llenado de piscinas públicas y privadas fue el que más dio que hablar aunque afectase a una pequeña parte del Pirineo y Andalucía.
En la actualidad, Cataluña es la que peor parada está. La mitad occidental está enmarcada por la cuenca del Ebro y la oriental por cuencas internas. Los embalses en la parte del Ebro están al 58,6 % de su capacidad, según este informe mensual. Sin embargo, la mitad este apenas reúne el 31 % de su capacidad. Esta situación ha provocado que el Gobierno autonómico declare que hasta 495 municipios se expongan a una serie de restricciones, según el Decreto Ley 1/2023 de la Generalitat de Cataluña y la Agencia Catalana del Agua.
El resto de España tampoco puede estar del todo tranquila, la situación es grave salvo en el cuadrante noroeste. Según los últimos datos, las cuencas de Andalucía están al 25,8 %, las de Murcia al 37,8 %, las de Extremadura al 46,5 % y las de Cantabria al 44,2 %.
Algunas de las restricciones por comunidad
Comenzaremos hablando sobre Cataluña, la más afectada. Este verano la agricultura ya se está viendo afectada en un -40 % de su dotación “normal” de agua.
Muchos municipios que no están conectados a la red pública de suministro y que se abastecen de pozos están en situación de emergencia desde hace un año y el agua les llega a través de camiones cuba. El consumo de agua por persona a nivel autonómico aún sigue siendo alto, pero se limita a 230 litros por persona al día, un valor que supera al gasto habitual de un domicilio.
En Andalucía, la situación es similar y con cortes nocturnos en varios municipios de la comunidad. El norte de la provincia de Córdoba carece de suministro regular desde finales de marzo. Más de 80.000 vecinos de entre el Alto Guadiato y los Pedroches pueden vivir con normalidad desde que el embalse de Sierra Boyera se secó y el agua venía contaminada desde el embalse de La Colada. El llenado de las piscinas privadas con agua potable también está prohibido y muchos ayuntamientos han eliminado las duchas y los lavapiés de las playas.
Extremadura también sufre cortes nocturnos en el suministro de agua. La fase III del Plan de Emergencia por Sequía está activada y prevé cortes en extrarradios y la prohibición de regar jardines y zonas verdes. Tampoco se podrán lavar vehículos, llenar piscinas privadas ni gastar más de 189 litros por persona al día.
El resto de autonomías, aunque las autoridades no hayan acordado limitaciones, hay que recordar a los ciudadanos un uso responsable del agua. Muchos municipios se enfrentan a un gran desafío debido a la actual situación de sequía, que se prevé que se prolongará a lo largo de los próximos años. La planificación de la gestión del recurso, a través de planes de emergencia eficaces, es la gran prioridad para conseguir una respuesta rápida, coordinada y eficaz.